El documento narra un mensaje divino en el que Dios decide destruir la Tierra en 24 horas debido a la maldad humana. Los líderes mundiales informan a sus pueblos: Bush comunica la existencia de Dios y el fin de EE.UU., Fidel Castro critica haber dudado de Dios y el fin de la revolución cubana, y Zapatero se autoproclama mensajero de Dios y promete el fin de todos los problemas en España.