El documento describe una visita al Jardín de Getsemaní, donde Jesús oró antes de ser arrestado. Describe los olivos centenarios que estuvieron presentes y cómo Jesús pidió a sus discípulos que lo acompañaran pero lo abandonaron. Explica que fueron los judíos quienes condenaron a Jesús a la crucifixión. Concluye expresando la esperanza de que la verdad de Jesús conduzca a la paz y fraternidad entre todos los pueblos.

1. Getsemaní, 4 mayo 2012
Buenas tardes, estamos en el Jardín de Getsemaní el campo de los
olivos, muy bonito y sus troncos son mas que centenarios, algunos tienen
mas de 2000 años y vieron también al Maestro que durmió, los acarició y
los abrazo y fue su última noche. Donde pidió ayuda, amistad, amor a los
Suyos y Les dijo: “Acompañarme, no os durmáis, no me abandonéis”.
Pero los hombres somos débiles y nos dormimos y lo abandonamos.
Una persona me hizo una pregunta: ¿Por qué los judíos, hay que
pedir perdón por ellos? la respuesta es muy sencilla ¿Quién lo llevó a la
crucifixión? Los Romanos no, Poncio Pilatos tampoco, esta escrito que se
lavó las manos, pero quien lo condenó fue su propia gente, los Suyos.
Y pidió de nuevo. “No me abandonéis” y los humanos lo
abandonaron, quisieron elegir a Barrabas. Creyeron que Barrabas con la
espada les defendería ¡que inocentes eran! o querían aparentar. De
inocencia no tenían nada, era únicamente poder. Tenían miedo que el
Cordero de Dios les quitara el poder, era más fácil quitárselo de encima.
¿Donde esta la verdad? que después de 2000 años continua yendo
delante de nosotros y nosotros lo seguimos y lo seguiremos y siempre
reconoceremos la verdad, a buen entendedor, pocas palabras bastan.
Nos llevaremos unas ramas de olivo, porque en nuestro corazón
simbolizan la paz, la alianza, la generosidad y creed que el mundo es
bueno y que cada año venimos y vendremos a pedir perdón, para este país
y especialmente para todo el planeta, para nuestra madre la Tierra.

2. Olivos que habéis visto y habéis vivido la
historia, ayudar a los humanos que abran los ojos y
puedan ver la Verdad. Que un día puedan darse la
mano todos y que podamos abrazarnos con
sinceridad y con esa fraternidad que tanto nos
enseño y poco aplicamos.
Con todo mi amor,
La Jardinera