La madre estaba preparando la casa para el día siguiente antes de irse a dormir: preparó la comida, limpió la ropa, recogió los juguetes, escribió notas, apagó las luces y se aseguró de que los niños estuvieran listos para dormir. A pesar de estar cansada, completó muchas tareas antes de ir a la cama, ilustrando por qué las mujeres suelen vivir más que los hombres debido a su capacidad para lidiar con múltiples responsabilidades.