SlideShare una empresa de Scribd logo
1 de 8
Todo comenzó un día
nublado y frío.
Yo sentía que algo iba a pasar. Mi
 angustia llegó al máximo cuando
 mi padre me dijo que el tío Álvaro
 había muerto.
Desde ese momento sentí una
 sombra extraña siguiéndome
 a todos lados.
Cuando llegamos al velorio, toda la familia
 estaba triste.
Llegó la noche, mi primo y yo fuimos al
 almacén, de regreso una fuerza extraña nos
 envolvió diciéndonos con vos de tristeza:
 “Libérenme, libérenme”.
Corrimos asustados sin fijarnos
 donde íbamos, con la imagen
 de la sombra que nos seguía.
Allí me di cuenta que era el tío Álvaro.
Me detuve y agarre a mi primo, encaramos a
 esa sombra que nos seguía.
Antes que pudiéramos hablar vimos como
 otras sombras terminaban de encadenarlo.
Desapareció en la noche
 detrás de nuestros ojos.

Más contenido relacionado

La actualidad más candente (9)

Electronica digital
Electronica digitalElectronica digital
Electronica digital
 
Necesito un abrazo
Necesito un abrazoNecesito un abrazo
Necesito un abrazo
 
Pasaras por mi vida
Pasaras por mi vidaPasaras por mi vida
Pasaras por mi vida
 
2do.B Grupo Tiburon Poemas
2do.B Grupo Tiburon Poemas2do.B Grupo Tiburon Poemas
2do.B Grupo Tiburon Poemas
 
Vuela halcón al señor
Vuela halcón al señorVuela halcón al señor
Vuela halcón al señor
 
A marcelo
A marceloA marcelo
A marcelo
 
Renunciaminento
RenunciaminentoRenunciaminento
Renunciaminento
 
Proyecto 2 parcial
Proyecto 2 parcialProyecto 2 parcial
Proyecto 2 parcial
 
Recursos.poéticos
Recursos.poéticosRecursos.poéticos
Recursos.poéticos
 

Mi tío 2

  • 1.
  • 2. Todo comenzó un día nublado y frío.
  • 3. Yo sentía que algo iba a pasar. Mi angustia llegó al máximo cuando mi padre me dijo que el tío Álvaro había muerto.
  • 4. Desde ese momento sentí una sombra extraña siguiéndome a todos lados.
  • 5. Cuando llegamos al velorio, toda la familia estaba triste. Llegó la noche, mi primo y yo fuimos al almacén, de regreso una fuerza extraña nos envolvió diciéndonos con vos de tristeza: “Libérenme, libérenme”.
  • 6. Corrimos asustados sin fijarnos donde íbamos, con la imagen de la sombra que nos seguía.
  • 7. Allí me di cuenta que era el tío Álvaro. Me detuve y agarre a mi primo, encaramos a esa sombra que nos seguía. Antes que pudiéramos hablar vimos como otras sombras terminaban de encadenarlo.
  • 8. Desapareció en la noche detrás de nuestros ojos.