La tecnología ha mejorado la vida diaria a través de letreros interactivos con reconocimiento facial y táctil que brindan información sobre productos, vehículos inteligentes con Internet que informan sobre el tráfico y ofrecen entretenimiento, y avances científicos que resuelven problemas humanos. Sin embargo, la tecnología también debe usarse de manera responsable para crear e innovar, no destruir el planeta o lastimar a las personas.