El documento describe la construcción y caída del Muro de Berlín, que dividió a Alemania durante la Guerra Fría. El muro se construyó en 1961 y separó a Berlín durante 28 años hasta que cayó en 1989, lo que simbolizó el fin de la división de Alemania y el comienzo de una nueva era en Europa. Miles intentaron escapar de Berlín Oriental a pesar de los riesgos, y algunos murieron en el intento, hasta que finalmente el muro fue demolido en 1989 tras periodos de tensión, lo que permitió la reunificación

1. 1989, EL MUNDO CAMBIA
Hace 20 años, el Muro de Berlín cayó tras separar durante 28
años la capital alemana Berlín. Consecuencias de la Primera
Guerra Mundial y de la Guerra Fría, Alemania estuvo dividida
por un muro que construyó el partido socialista alemán el
1961. Su caída en 1989 simbolizó una nueva era en Europa.

2. CONSTRUCCIÓN DEL MURO
En la mañana del 8 de agosto de 1961,
los berlineses despertaron para encontrar
que no podían desplazarse entre los dos
sectores de la ciudad. Al comienzo fue
una barrera de ladrillos y alambre de
púas que luego se convirtió en un muro
de concreto de más de 150 kilómetros de
largo.
EN MEDIO DE LA GUERRA FRÍA
Meses después de la construcción del
muro, tanques estadounidenses se
enfrentaban a tanques soviéticos, a lado
y lado, a la altura del cruce Checkpoint
Charlie, en uno de los momentos de
mayor tensión entre las dos potencias.

3. ESCAPES MORTALES
Guardias fronterizos de Berlín Oriental
cargando al moribundo Peter Fechter,
acribillado al intentar escalar el muro en
1962. A lo largo de los años, miles
buscaron métodos ingeniosos para
escapar; 239 murieron en el intento.
KENNEDY EN BERLÍN
"Ich bin ein Berliner" ("Soy un berlinés"),
dijo el presidente de EU John F.
Kennedy a más de 100 mil ciudadanos
de Berlín Occidental después de haber
visitado el muro en 1963.

4. REAGAN PIDE DERRUMBAR EL MURO
Casi 25 años después, en 1987, el
presidente Ronald Reagan dio un
discurso sobre la libertad frente a la
bloqueada Puerta de Brandenburgo
donde pidió a su homólogo soviético
Mijáil Gorbachov de manera un tanto
provocadora:
EL 9 DE NOVIEMBRE DEL 1989
El 9 de noviembre del 1989, después de
un periodo de tensión, el gobierno de
Alemania Oriental declaró que sus
ciudadanos podían cruzar a occidente.
Muchedumbres se acercaron al muro, lo
escalaron y cruzaron al otro lado.

5. ABREN PASO
En los días siguientes, ciudadanos y
trabajadores se abrieron paso a través
del muro en diferentes partes de la
ciudad. Los soldados fronterizos
observaban incrédulos, como caían
los segmentos.
CÉLEBRE ANÉCDOTA
El virtuoso del violonchelo Mstislav
Rostropovitch, que había tenido que
exiliarse al Oeste, fue al pie del muro a
animar a los que lo demolían.

6. ALEMANIA FESTEJA
Alemania unificada. Jóvenes alemanes
del Este y Oeste celebraron la unión de
sus países el 3 de octubre de 1990.
Después de la euforia, las dos
sociedades tuvieron problemas
acoplándose la una a la otra, con
dificultades que todavía se manifiestan
hoy en día.
IMÁGENES QUE MARCARON LAS MEMORIAS
Las imágenes tomadas en el 1989 se
quedaron grabadas en las memorias.
Simbolizan la reunificación de Alemania
y un renuevo en Europa.

7. CAMINO AL OESTE
Tras el anuncio de la caída del Muro de
Berlín, miles de alemanes que vivían en
Berlín Este se concentraron para cruzar
hacia el Berlín Oeste
120 KM DE MURO
El muro tenía una longitud de más de 120 km.
La construcción inicial fue mejorada, de tal
forma que la cuarta generación, que empezó a
construirse en 1975, era de hormigón armado,
tenía una altura de 3,6 m y estaba formado por
45.000 secciones independientes de 1,5 m de
longitud. Además, la frontera estaba protegida
por una valla de tela metálica, cables de
alarma, trincheras, una cerca de alambre de
púas, más de 300 torres de vigilancia y 30
búnkers.

8. CONCIERTO HISTÓRICO
Roger Waters, ex miembro de la
banda británica Pink Floyd, organizó el
gigantesco concierto “The Wall Live in
Berlin”, en Berlín, Alemania, en julio de
1990, con varios famosos músicos,
incluyendo a Van Morrison, Sinéad
O'Connor, Cyndi Lauper, Scorpions,
Jerry Hall y Bryan Adams, entre otros,
para conmemorar la caída del Muro de
Berlín.
LO QUE QUEDA DEL MURO
Lo que queda. Una placa señala por
dónde pasaba el muro a la altura de
Checkpoint Charlie, uno de los antiguos
cruces de cuando la ciudad se
encontraba dividida.

9. MONUMENTO HISTÓRICO
Pequeños tramos del muro se
conservaron en algunas partes de
Berlín como monumentos históricos.
Muro de Berlín: los grandes escapes
A pesar de la permanente vigilancia armada, miles intentaron huir a oeste, algunos por medios de gran imaginación.
Cuando se cumplieron 15 años de la caída del muro, Max Seitz de BBC Mundo escribió sobre los escapes a través del muro de Berlín, a 20 años de este
evento, les presentamos nuevamente este material.
El Muro de Berlín era una maquinaria de muerte.
Sus más de 150 kilómetros eran vigilados por militares, policías y voluntarios civiles que tenían un fusil siempre a mano para apagar cualquier ansia de
libertad.
Pero los fugitivos no sólo debían esquivar a los guardias.
También tenían que sortear, además del muro propiamente dicho, cercos con alarmas, armas que se disparaban por medio de resortes, torres de
vigilancia, búnkers, alambres de púa, perros feroces, terrenos que permitían rastrear huellas y hasta campos minados.
No era sencillo: en casi tres décadas, cerca de 240 personas murieron en el intento.
Lo más fácil -si es que se puede usar esta palabra- era escabullirse por uno de los puestos de control.
Cuenta la leyenda que, a mediados de los 60, un argentino logró escapar de Alemania Oriental con su prometida.
Así figura, aunque sin mención de los nombres, en una cartelera del museo Checkpoint Charlie, dedicado al muro que dividió a Alemania entre 1961 y
1989.
En una visita al museo me enteré de que el hombre descubrió, en un negocio, un automóvil bajo con el cual podía colarse por las barreras de los pasos
fronterizos entre el Este y el Oeste. Lo compró y, según recuerdan, pasó sin que los guardias lo advirtieran.
Claro que, a falta de datos precisos, nadie puede confirmar esta historia.

10. Tampoco he podido confirmar un caso que conocí de cerca en Buenos Aires.
En la escuela alemana a la que asistí de niño se decía que el director había escapado de Berlín oriental oculto en un ataúd... ¡con un cadáver! ¿Sería
cierto? No lo sé, pero todos hablaban de ello.
Todo por la libertad
Sin embargo, hay otros escapes bien documentados. Escondites inesperados en vehículos, túneles subterráneos, globos aerostáticos, disfraces... Todo
parecía útil a la hora de huir de la opresión.
En 1964 se conoció tal vez el caso más resonante.
Berlineses occidentales cavaron un túnel de 145 metros de largo, 12 metros de profundidad y 70 centímetros de diámetro que pasaba por debajo del
muro.
Gracias a este simple pero trabajoso recurso, unos 60 habitantes del Este consiguieron huir, tras entrar por un baño y salir por el sótano de una
panadería.
Tres años antes, el primer soldado oriental en desertar había mostrado otro camino. En el momento menos esperado, se lanzó a la carrera y arrojó su
fusil para cruzar al Oeste lo más rápido posible.
En 1963, una joven confeccionó uniformes soviéticos para sus amigos, que lograron escapar en automóvil -con ella escondida, claro- tras responder en la
frontera el bien ensayado saludo al estilo soviético.
Una década después, utilizando un motor auxiliar de bicicleta, un alemán oriental construyó un mini-submarino con el que cruzó el mar con rumbo a
Dinamarca, cubriendo 25 kilómetros.
Y con un globo de aire caliente que ellas mismas fabricaron, dos familias se fugaron en 1979. No tenían conocimientos en la materia, pero leyeron libros
especializados y probaron diferentes telas y combustibles antes de lanzarse a la aventura.
Desde luego, hubo muchos otros escapes exitosos. Dicen que fueron 5.000 en total. Todos ellos muestran que, para huir, era necesaria una mezcla de
viveza, creatividad y fundamentalmente coraje.
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Lo siento, pero esto es sin fines de lucro y además es un buen material que
vale la pena difundir