El documento narra la historia de una niña de 5 años cuyos padres ateos murieron en una pelea frente a ella. Fue acogida por una madre cristiana que la llevaba a la iglesia. En su primera clase dominical, la niña reconoció a Jesús en una foto diciendo que era el hombre que la abrazó la noche que sus padres murieron. El documento insta al lector a reenviar el mensaje si cree que Dios ha obrado en su vida.