Un joven médico recién graduado se detiene en un pequeño pueblo para cargar gasolina. Al no haber nadie en la gasolinera, un niño le informa que la hija del dueño acaba de morir y todos están en su velatorio. El médico decide ir al velatorio y observa que la hija en realidad está en estado catatónico, no muerta. Le dice al padre que existe una posibilidad de despertarla provocándole una sensación fuerte, y sugiere que su novio pase la noche con ella. Después de 4 horas, la