La ley de Obras por Impuesto permite que empresas privadas construyan obras públicas a cambio de descuentos en sus impuestos a la renta. Las empresas pueden adelantar el pago de impuestos para financiar proyectos priorizados por gobiernos regionales y universidades públicas. El estado devuelve el 100% de lo invertido a través de descuentos en los impuestos en los próximos 10 años. Algunas obras desarrolladas incluyen hospitales, colegios y carreteras.