Los cuidados han existido desde el origen de la humanidad como actos para permitir y luchar por la vida a través de asegurar funciones vitales como alimento, protección del clima, y defender el territorio. A lo largo de la historia, los cuidados se han mantenido con su sentido original de "cuidar de" la vida a pesar de las orientaciones bien/mal y las separaciones de género, y siempre se han enfrentado a la omnipresente amenaza de la muerte a través de figuras como chamanes, sacerdotes y médicos.