Este documento es una oración que expresa la necesidad de vivir de acuerdo con los principios de fraternidad, dignidad y justicia hacia todos los seres humanos y la creación de Dios. Pide a Dios que se haga presente en el mundo a través de personas comprometidas con este mensaje y que permita que la gente no se olvide de cuidar a los demás como Dios los cuida.
2. Padre bueno que estás entre nosotros.
Sentimos tu presencia cuando nos cuidas
por medio de nuestros hermanos y hermanas.
3. Padre misericordioso,
nos invitas a ser cuidadosos
con los que más sufren.
Así damos testimonio
de tu infinito amor
por todas tus criaturas.
4. Deseamos que te hagas presente en nuestro
mundo,
por medio de personas que se comprometan
a vivir el mensaje de fraternidad,
de dignidad y de justicia hacia todo ser humano,
y hacia toda tu creación.
Queremos dar nosotros el primer paso para ser así.
5. Cumplir tu voluntad hacia todos los seres
es nuestra misión en la vida. Desvivirnos por los demás.
Dar gratis lo que gratis recibimos.
Cuidar como tú nos cuidas: acariciando al triste,
levantando al caído, curando al apaleado,
luchando por los más débiles,
sembrando la paz de la verdad.
Viviendo con cuidado, sencillamente.
6. Estamos hambrientos de pan y de
ternura. De justicia y de belleza.
De conocimiento y de silencio.
De contemplación y de lucha.
De felicidad y de compromiso.
De compartir y de belleza.
De serenidad y de esperanza.
De lágrimas y de regocijo.
7. No seremos plenamente felices
hasta que no lo sea el resto de la humanidad,
hasta que no se alcance la dignidad
de todos los seres humanos,
hasta que no tratemos con delicadeza
a nuestra madre, la tierra.
Seremos perdonados cuando nuestra vida
sea un testimonio de fraternidad
hacia todo lo creado.
8. No permitas que nos acomodemos,
que nos enfriemos,
que nos recostemos en la hamaca del olvido.
Que no apaguemos nunca la llama
que arde en nuestro interior,
la chispa que brotó de tu fuego,
la ardiente necesidad de compartir
tu amoroso cuidado con todos los demás seres
9. Así sea,
que se cumpla
en nuestras vidas.
Te lo pedimos a ti,
buen Dios nuestro,
que nos cuidas con
tanto cariño.
10. Padre bueno que estás entre nosotros.
Sentimos tu presencia cuando nos cuidas
por medio de nuestros hermanos y hermanas.
Padre misericordioso, nos invitas a ser cuidadosos
con los que más sufren.
Así damos testimonio de tu infinito amor por todas tus criaturas.
Deseamos que te hagas presente en nuestro mundo, por medio de
personas
que se comprometan a vivir el mensaje de fraternidad, de dignidad y de justicia
hacia todo ser humano, y hacia toda tu creación.
Queremos dar nosotros el primer paso para ser así.
Cumplir tu voluntad hacia todos los seres es nuestra misión
en la vida. Desvivirnos por los demás.
Dar gratis lo que gratis recibimos.
Cuidar como tú nos cuidas: acariciando al triste, levantando al caído, curando
al apaleado, luchando por los más débiles,
sembrando la paz de la verdad. Viviendo con cuidado, sencillamente.
Estamos hambrientos de pan y de ternura.
De justicia y de belleza.
De conocimiento y de silencio.
De contemplación y de lucha. De felicidad y de compromiso.
De compartir y de belleza. De serenidad y de esperanza.
De lágrimas y de regocijo. (Miguel Ángel Mesa)