El documento presenta varios pasajes bíblicos que hablan sobre la fe y la promesa de Dios. Abram creyó en la promesa de Dios de darle una gran recompensa y la tierra como herencia. Jesús sanó a la mujer cananea por su gran fe. Jesús también dijo que él es el camino a Dios. La fe en Jesús nos permite seguir adelante y fijarnos en él a pesar de las dificultades. Dios proveerá todas nuestras necesidades y debemos seguir el camino que él nos ha mostrado.