La integración y la acción son conceptos clave para promover la justicia social. La integración implica incluir a todos los grupos en la sociedad de manera significativa, mientras que la acción se refiere a tomar medidas concretas para abordar las desigualdades y promover la igualdad de oportunidades. Juntos, la integración y la acción pueden ayudar a crear una sociedad más justa e inclusiva para todas las personas.