1. Tratamiento de sustitución para usuarios de inyecciones de
opiáceos para prevenir la transmisión de la infección por
VIH
El tratamiento de sustitución oral para los usuarios de opiáceos
inyectables reduce las conductas relacionadas con la droga que
presentan un alto riesgo de transmisión del VIH, pero tiene un efecto
menor sobre las conductas de riesgo relacionadas con el sexo.
Los usuarios de drogas inyectables son vulnerables a la infección por
el VIH y otros virus transmitidos por la sangre debido al uso colectivo
del equipo de inyección, así como por la conducta sexual. Esta
revisión examina los estudios originales que informaron la frecuencia
o la prevalencia de las conductas de riesgo, o la prevalencia de
infección por VIH relacionada con el tratamiento de sustitución de la
dependencia de los opiáceos, para evaluar el grado en el cual el
tratamiento de sustitución oral previene la transmisión de la
infección por VIH.
2. La metadona reduce el riesgo de infección por
VIH en más de la mitad
• La terapia de sustitución con metadona reduce el riesgo de
transmisión del VIH en la población de usuarios de drogas
inyectables (UDI), según concluye un estudio publicado
recientemente en la edición digital de British Medical Journal. El
análisis realizado reveló una reducción del 54% en el riesgo de
infección por VIH en comparación con la incidencia habitual
entre dicha población.
• Asimismo, indican que los beneficios de la terapia de sustitución
probablemente se pierdan al interrumpir el tratamiento, sobre
todo si no se sigue de forma voluntaria, o cuando estas personas
vuelven a tomar drogas inyectables. Por último, concluyen
que, en su opinión, los artífices de políticas deberían intentar
maximizar la proporción de usuarios de drogas inyectables en los
programas de tratamiento y promover su retención en los
mismos.
3. Tipos de tratamiento y fármacos para
el VIH
•
La base actual del tratamiento de la Infección por VIH es
utilizar fármacos que impidan la acción de las enzimas del
VIH. Los más conocidos y disponibles son los que actúan
sobre la Transcriptasa y la Proteasa.
• También están ya disponibles fármacos que inhiben la
fusión del virus y, por tanto, impiden su entrada en la
célula, y ya comienzan a utilizarse en combinación con los
demás fármacos dentro de las TARGA.
• Además, están en fases finales de desarrollo fármacos
inhibidores de la Integrasa así como inhibidores del proceso
de maduración de las partículas virales.
4. La vacuna
• Hay ensayos sobre más de una decena de tipos distintos de
posibles vacunas. Los resultados todavía son
preliminares, pero algunas vías son prometedoras, aunque
es posible que se tarde todavía mucho tiempo, quizá más
de una o dos décadas, para tener una vacuna eficaz.
• Y, cuando se consiga, es probable que la vacuna no sea
100% efectiva para todas las personas desde el punto de
vista de evitar o prevenir la infección, sino que, más
bien, se la utilice, combinada con los fármacos
antirretrovirales, para tratar a las personas ya infectadas.
Habrá seguramente distintos tipos de vacunas que se
aplicarán de maneras diversas antes o durante la infección
por VIH.