La Corte Constitucional declaró la inexequibilidad de dos reglas del proceso legislativo especial para la paz que permitían solo modificaciones con el aval del gobierno y votación del articulado en bloque, vulnerando los principios de separación de poderes y sustitución parcial de la Constitución. La Corte explicó que estas reglas contenían limitaciones desproporcionadas a la capacidad deliberativa y decisoria del Congreso.