Los Juegos Olímpicos antiguos se regían por un estricto reglamento. Duraban 7 días y solo podían participar hombres griegos libres. Estaba prohibido sobornar a los jueces o adversarios, emplear la fuerza ilegalmente, dar muerte al oponente o apelar públicamente las decisiones de los árbitros sin antes acudir al senado de Olimpia.