El documento define la denuncia como un acto mediante el cual se informa a la autoridad sobre hechos aparentemente delictivos. Cualquier persona puede denunciar, mientras que ciertos funcionarios públicos tienen la obligación legal de denunciar. Las personas exoneradas de la obligación de denunciar incluyen abogados, médicos y sacerdotes respecto a información recibida en el ejercicio de su profesión. Una denuncia no requiere elementos formales, puede ser verbal y el denunciante no necesita ser la víctima.