La programación orientada a objetos es un paradigma de programación que surgió en los años 1970 y se popularizó en los años 1980 y 1990. Un objeto representa un ente del mundo real con atributos y métodos, y las clases agrupan objetos con propiedades y comportamientos comunes. Lenguajes como Simula, Smalltalk y C++ ayudaron a difundir este paradigma, definieron sus características como abstracción, encapsulamiento e herencia, y muchos lenguajes posteriores incorporaron esta orientación a objetos.