El documento describe la confirmación como uno de los sacramentos de la iglesia católica. Explica que la confirmación se lleva a cabo mediante la imposición de manos y la unción con óleos sagrados, y que su propósito es integrar plenamente a las personas bautizadas como miembros de la comunidad. También discute las diferentes edades a las que se administra el sacramento en diferentes denominaciones cristianas.