La evaluación educativa tiene como objetivo medir el aprendizaje de los estudiantes. Incluye elementos como objetivos, actividades, recursos y evaluación. Existe el modelo clásico de Tyler y el modelo sistémico centrado en el cliente. Algunos modelos de evaluación son el Tyleriano, de la evaluación orientada a la planeación, el modelo centrado en el cliente y el de Arturo de la Orden Hoz. La evaluación formativa pretende ayudar al desarrollo del programa educativo y no valorar el mérito o logro de los estudiantes.