Este poema honra a los maestros por su noble labor de enseñar valores a los estudiantes y sembrar alegría, paz y conocimiento, comparándolos con Jesús quien enseñó con su palabra y aniquiló el miedo y la ignorancia. El poema describe a las maestras como mujeres valerosas que hacen que la patria sea más completa al brindar luz y amor a través de su enseñanza.