El documento critica la influencia negativa de la televisión en México, argumentando que las telenovelas y noticieros ocultan problemas reales, la educación se ve afectada por el tiempo frente a la TV, y los medios manipulan la información y opiniones del público para beneficiar a las empresas y al estado. Adicionalmente, la TV vende productos y estilos de vida que no son necesarios y hace que la gente pierda su identidad formando parte de una masa.