Los televisores LCD utilizan pantallas de cristal líquido que orientan la luz para mostrar imágenes. Son más económicos que los televisores de tubo de rayos catódicos y ahorran hasta un 40% de energía. Existen tres tamaños de pantallas LCD: pequeñas de hasta 48 cm, medianas de hasta 74 cm y grandes de más de 75 cm. Al comprar un televisor LCD, es importante considerar la resolución máxima, el tamaño y la garantía ofrecida.