1. El “testamento” de Bernadette Soubirous, la jovencita a quien se apareció la Virgen de Lourdes ¡Jesús y María, gracias!
2. El texto aquí presentado no fue escrito por Santa Bernadette, si bien expresa con precisión lo que fue su vida. Podemos creer que estas palabras estaban vivas en su corazón, aunque ella nunca las habría manifestado ni de palabra ni por escrito. Fu la escritora Marcelle Auclair que al escribir su vida interpretó los más íntimos sentimientos de Bernadette, poniendo en boca de ella estas palabras
3. Está muriendo una mujer de 35 años: Marie Bernarde Soubirous, “conversa” de las Monjas de Nevers, en el mundo Bernadette, aquella que había visto y hablado con la Stma. Virgen en Lourdes. Tenía una pierna en putrefacción. Contempla su pasado de miserias y de hambre primero, de desprecios e injusticias después, de incomprensión siempre. Y éste es su testamento espiritual:
4. Por mi madre que murió lejos, por la pena que sentí cuando mi padre, en vez de abrir los brazos a su pequeña Bernadette, me llamó Sor Marie Bernarde: ¡gracias, Jesús! “ Por la indigencia de mamá y de papá, por la ruina del molino, por el vino del cansancio, por las ovejas con roña: ¡gracias, Dios mío! Gra cias , Dio s mío , p o r e l Procura d or, p o r e l Comisario, p o r los Gendarm es , p o r l as dur as pa labras d e Don Peyremale, p o r los días en que viniste , V irgen Mar í a, y por los días que no viniste , no sabré darte las gracias más que en el Para í so . Pero por las burlas, por los ultrajes, por quienes me han considerado una loca, por quienes me han considerado mentirosa, por quienes me han creído una interesada, ¡GRACIAS, VIRGEN SANTA! Por la ortografía que n unca he sabido, por la memoria que n unca he tenido, por mi ignorancia y mi estupidez, ¡gracias! ¡Gracias, gracias, porque si hubiera habido en la tierra una niña más estúpida que yo, la habrías escogido a ella ! Boca de más era yo, para darle de comer; por los niños que cuidaba, por las ovejas que guardaba, ¡gracias!
5. Gracias por haber saciado de amargura este corazón demasiado tierno que me has dado. Por la Madre Josefina que me ha proclamado una inútil, ¡GRACIAS! Por los sarcasmos de la Madre Maestra, por su voz dura, su s in j usti c i as , su s iron ías , y p o r e l pan de la h umil l a c i ón , ¡ gra c i as ! Gracias por haber sido aque lla de quien la Madre Teresa po dí a d ecir : No me haces nunca suficientes desastres ”. Gra cias p o r haber sido la privilegia d a d e los r egaños , de quien mis Hermanas decían : “ ¡Qué suerte no ser Bernadette!” ¡ Gracias por haber sido Bernadette, amenazada de cárcel porque te había vist o , V irgen Santa! Mirada por la gente com o un b icho rar o ; es a Bernadette tan me zqu ina, que a l verla s e d ecí a: “ ¿No es más que esa ?” Por este cuerpo míserable que me has dado, por esta enfermedad de fuego y de humo , por mis carnes e n putrefa cción , por huesos caria dos , p o r mis sudor es , por mi f ie bre, p o r mi s dolor es sord os y a g u dos , ¡ GRA CIAS , DIOS MIO ! Por esta alma que me has dado, p o r e l des i erto de la arid ez interior, p o r tu no ch e y tus relámpagos , p o r tus silencios y tus rayos ; p o r t od o, p o r Tí ausente y presente, ¡ GRA CIAS , GRA CIAS , O H JESÚS !
6. Además, tantos a ños después de su muerte, por su cuerpo aún corre sangre líquida. Es algo sobrenatural, y todo lo que es sobrenatural es obra de DIOS. De hecho, la Iglesia decidió colocarla en una urna de cristal en Nevers, expuesta a la veneración de los peregrinos. Hoy día, Santa Bernadette, nacida el 7 de Enero de 1844, tendría ya 165 años. Bernadette murió a los 35 a ños y su cuerpo fue exhumado tres veces en el espacio de 46 a ños, con motivo del proceso de canonización, con la increíble sorpresa de que siempre estaba intacto, a pesar de que su rosario ya estuviera oxidado y su hábito lleno de humedad. Los médicos que por primera vez la exhumaron quedaron sorprendidos al encontrarla totalmente intacta (y lo sigue estando), empezando por el hígado, que al parecer es lo primero que se deshace, estando también intactos los dientes y las uñas .
7. Y para que podamos hacernos una idea de cómo se encuentra y nos asombremos de cómo se ve, aquí podemos contemplar a Santa Bernadette Sobre el heroico, so breh umano “gra cias ” d e Bernadette, hacen eco las palabras de la Santísima Virgen durante l as apari c ion es d e veinte años atrás : “ No t e prometo hacerte fel íz e n esta vi d a, sino en la otra ”