A los jóvenes de ahora les condenamos a una vida de miedo, por cómo su huella digital puede impactar en su vida en el futuro, esa foto de esa fiesta, ese comentario en una red social, ese momento que queremos olvidar, ese conflicto, incluso esa condena judicial o ese archivo de una causa. Hoy en día confiamos en la tecnología, creemos que es más eficiente y más justa incluso que la toma de decisiones humana. .Sabemos que cuando un producto tecnológico no lo pagamos con dinero, en realidad es que nosotros somos el producto, y nuestros datos son los que están alimentando una maquinaria de anuncios, un modelo de negocio basado en la comercialización de datos personales.