La historia trata sobre Raquel Pacheco, una adolescente que fue adoptada y creció en una familia acomodada. Desde temprana edad sintió atracción por el sexo y el dinero fácil. A los 17 años abandona su casa y comienza a trabajar como prostituta bajo el nombre de "Bruna Surfistinha". Trabajó en un prostíbulo privado durante tres años hasta que dejó la prostitución. Tuvo un novio llamado Pedro que le propuso matrimonio. Finalmente, escribió un blog popular sobre sus experiencias y