El documento ofrece tres normas de etiqueta para el uso de internet y correo electrónico: 1) Asegurarse de tener la dirección correcta del destinatario para evitar enviar un mensaje a la persona equivocada, 2) Recordar que cualquier mensaje electrónico puede ser compartido fácilmente con otros, y 3) Verificar la identidad del remitente antes de responder o cumplir una solicitud indiscreta, ya que los mensajes fraudulentos existen.