La violencia familiar puede adoptar múltiples formas, como el maltrato a mayores, entre cónyuges, hacia niños, mujeres u hombres discapacitados. A menudo es difícil precisar un esquema típico debido a que la violencia puede ser física o psicológica y ocurre en todas las clases sociales, culturas y edades. Generalmente, los adultos son los agresores hacia uno o más individuos. Las personas que sufren violencia familiar suelen ocupar posiciones de mayor vulnerabilidad en el grupo familiar, especialmente niños y mujeres.