La tecnología WiFi permite el envío de datos a través de ondas de radio en lugar de cables, ofreciendo movilidad y flexibilidad pero con un ancho de banda menor. Utiliza estándares 802.11 y dispositivos como puntos de acceso, routers, tarjetas PCI, PCMCIA y USB. Presenta ventajas como ahorro de costes y escalabilidad aunque requiere mayor inversión inicial y plantea retos de seguridad e interferencias.