El documento habla sobre una persona que alguna vez gritó el nombre de alguien por las calles durante una noche lluviosa y oscura en la que se sintió perdido. Ahora esa persona ya no busca ni llama por las noches, y aunque otros no saben que tienen una mano que los guía, él ya no mira los ojos de esa persona en la basura ni duerme con un solo ojo abierto porque sabe que ya no volverá.
Y pensar que alguna vez grité tu nombre por las calles
1. Y pensar que alguna vez grité tu nombre por las calles.
Llovía en esa noche y hacía frío.
Me hundí en la negrura de no saber el camino de regreso.
Y allí fue que apareciste como angel de la lluvia,
Como amoroso pan, vaso de agua en la sed que era mi amiga.
Hoy no te busco ni llamo por las noches,
Hipotequé mi luz a la mañana que ya viene.
Aunque hay algunos que no saben de la mano que les guía.
Pobres de pobreza agria, de mirada torva y gesto de piedra,
Que comen de la misma comida cada día y no saben que todo
Se termina y no vuela como el ave que trae el sol.
Ya no miro tus ojos en la basura ni me duermo con un solo ojo
Pues sé que ya no vuelves .Ya nada vuelve.