Lg 513 fue creado por Albert Sintons Tol en 2020 para ayudar a la Tierra ante una invasión planeada por el planeta Zort. Arton, el líder de Zort, había encargado a Albert la creación de máquinas para Zort, pero cuando se enteró que Albert había creado un robot (Lg 513), envió máquinas asesinas llamadas Lator's para matar a Albert. Las Lator's mataron a Albert pero no encontraron a Lg 513, quien estaba escondido. Más tarde, Arton llegó a la Tierra para encontrar y mat

1. Yo robot
Yo fui creado en el año 2020 para ayudar al planeta Tierra de una devastación tota, una
devastación que iba a dar fin al planeta Tierra. Fui creado por un hombre llamado Albert
Sintons Tol, él era un sabio, fanático de la ciencia, de la tecnología, a él le gustaba hacer
todo tipo de experimentos y unos de ellos es hacer máquinas como robots. Mi nombre es
Lg 513 y fui creado para ayudar, no par amatar.
Antiguamente una leyenda decía que invasores iban a devastar a la Tierra, era cierto, en
el planeta Zort siempre había una debilidad, esta debilidad era destruir por completo al
planeta Tierra, matar a los seres vivos, hasta que ellos terminen de buscar lo que quieren.
Arton, el jefe del planeta Zort, tenía un lazo con Albert, este lazo era de que Albert creara
maquinas para que habiten en el planeta de Arton, hasta un momento Arton no sabía qué
hacer con ellos pero cuando él se enteró que Albert creó un robot, es decir, yo, Arton
creyó que Albert se estaba deshaciendo de él, así que mandó a matar a Albert, las
máquinas llamadas los Lator’s vinieron al planeta Tierra para encontrar y matar a Albert.
Los Lator’s encontraron a Albert y lo mataron pero lo que no encontraron fue a mí. Albert
tenía un escondite muy seguro y ahí me guardó hasta el momento que él me programó
para poder dar inicio a mi origen. Cuando los Lator’s llegaron a Zort, Arton no sabía qué
hacer porque había alguien todavía con vida y era yo. Arton quería matarme así que llegó
a la Tierra, Arton no se rendía, no se iría hasta encontrarme y me encontró pero no me
mató solo cambió la fecha de inicio, es decir, ya no me iba a prender en la fecha indicada
de la destrucción.