2. La violencia sexual se manifiesta con actos agresivos que mediante el uso de la fuerza física, psíquica o moral reducen a una persona a condiciones de inferioridad para imponer una conducta sexual en contra de su voluntad. Este es un acto que busca fundamentalmente someter el cuerpo y la voluntad de las personas.
3. La violencia sexual tiene múltiples formas: Acceso u hostigamiento en la calle, en el trabajo, en la casa, en el colegio, en la escuela, en la universidad, etc. Violación Explotación sexual, turismo sexual Abuso sexual de niños y niñas Prostitución Pornografía
4. El agresor sexual no es necesariamente un desconocido para la víctima; en ocasiones es, precisamente, su cercanía cotidiana a la misma la que le ha facilitado un determinado grado de confianza que ha derivado en la imposición de una determinada relación.
5. Los casos más frecuentes de violencia sexual son los ejercidos sobre niños (la pedofilia y el abuso sexual intrafamiliar) y la violación de mujeres.
6. El abuso sexual por parte de personas externas a las familias se puede prevenir cuidando de no dejar espacios en que haya riesgo de abuso de los hijos por parte de adultos extraños, y enseñando a los niños a no aceptar caricias que no sean en la cara o en las manos de parte de otros adultos.
7. Además si enseñamos a los hijos a hablar de lo que sienten y les pasa podremos estar alertas a cualquiera de los signos de abuso antes mencionados, recordando que el abuso sexual tiene siempre un proceso de preparación y es ahí dónde se puede detectar y prevenir a tiempo.