1. TRABAJO DE CIENCIAS POLÍTICAS
Presentado por :
• Carlos Roa
• Leidy Díaz
• Jhon Díaz
• Breyner Lascarro
• Elvira Morillo
10 º A
INEDEC , Barranquilla 26 de octubre 2012
2. GRAN DEPRESIÓN
• La Gran depresión fue una crisis económica mundial que se prolongó
durante la década del '20 anterior a la Segunda Guerra Mundial.
Su duración depende de los países que se analicen, pero en la
mayoría comenzó alrededor de 1929 y se extendió hasta finales de
la década de los años treinta o principios de los cuarenta. Fue la
depresión más larga en el tiempo, de mayor profundidad, y la que
afectó a más países de las sufridas en el siglo XX. En el siglo XXI
ha sido utilizada como paradigma de hasta qué punto puede llegar a
disminuir la economía mundial.
3. ORIGEN
• La llamada Gran Depresión se originó en los Estados Unidos, a
partir de la caída de la bolsa del 29 de octubre de 1929 (conocido
como Martes Negro, aunque cinco días antes, el 24 de octubre, ya
se había producido el Jueves Negro), y rápidamente se extendió a
casi todos los países del mundo.
• La depresión tuvo efectos devastadores en casi todos los
países, ricos y pobres. La renta nacional, los ingresos fiscales, los
beneficios y los precios cayeron, y el comercio internacional
descendió entre un 50 y un 66%. El desempleo en los Estados
Unidos aumentó al 25%, y en algunos países alcanzó el 33%.
4. ANTECEDENTES
• La guerra tuvo unas consecuencias económicas profundas y
duraderas, al poner fin al orden económico internacional, existente
desde la segunda mitad del siglo XIX. Supuso un descenso
demográfico directo e indirecto de alrededor del 10 % de la
población europea y de un 3,5 % del capital existente. Desde el
punto de vista financiero, el conflicto bélico conllevó un gasto
público descomunal en Europa financiado por deuda pública tanto
interna como externa que supuso la multiplicación por seis de la
deuda ya existente, también se valieron de la creación de dinero lo
que supuso una fuerte presión inflacionista.
5. CAUSAS
• Hacia 1925, la economía mundial se hallaba bastante equilibrada: la
producción había vuelto al nivel de antes de la Primera Guerra
Mundial, la cotización de las materias primas parecía estabilizada y
los países que atravesaban un periodo de alta coyuntura eran
numerosos. Sin embargo, no era un retorno a la belle époque. Una
serie de equilibrios tradicionales quedaban alterados: la producción
y el bienestar progresaban de manera espectacular en unas partes
(Estados Unidos, Japón), mientras que en otras, perdida la
prosperidad anterior a la guerra, vivían abrumados por el
desempleo y las crisis endémicas; en particular en el Reino Unido.
Al propio tiempo, los estadounidenses complicaban de singular
manera la posición de los europeos. La deuda internacional no podía
pagarse sino con oro o mercancías, y los estadounidenses frenaban
sus importaciones de Europa con nuevos y cada vez más elevados
derechos de aduana, al tiempo que utilizaban su superioridad para
imponer sus exportaciones a Europa.