El documento trata sobre la importancia de conocerse a uno mismo, comprometerse a la excelencia, y creer en uno mismo y en lo que se puede lograr. Incluye una parábola sobre el eco que enseña que nuestra vida es un reflejo de nuestras acciones y palabras, y que debemos dar más amor, felicidad y sonrisas a los demás. También incluye varias citas sobre la importancia de soñar en grande, creer en lo que no se puede ver, y aprovechar los momentos preciosos pero transitorios de la vida.
2. Conociéndome a mi mismo
Quien soy yo?
Cómo me veo a mi mismo?
Que espero de mi?
3. La calidad de vida de una persona es
directamente proporcional a su
compromiso a la excelencia, sin tomar
en cuenta la actividad que elija.”
Vincent T. Lombardi
4. No tienes que fijarte en
lo que te diga la
gente de tu propósito,
porque al hacerlo,
entonces, esto deja de ser
tuyo y pasa a
ser de otros, que podrán
darte sus opiniones.
Pero si esas opciones son
destructivas,
te hacen titubear, o
simplemente están
cambiando algo de lo
que tú deseas,
solamente, agradece,
porque cada quien tiene
su punto de vista y es
importante de acuerdo a
su propio criterio.
5. Hay una diferencia entre el DESEAR algo, y el
estar LISTO para recibirlo. Nadie puede estar
listo para recibir algo hasta que crea que
pueda tenerlo. El estado mental es creer.
Debes tener FE en ti mismo que lo puedes
lograr , no solamente esperanza o deseo.
6. Parábola El Eco
Un padre y su hijo estaban caminando en las montañas.
De repente, el hijo se cayó, lastimándose, y grito: -
¡Aaaaaayyyy! Para su sorpresa, oyó una voz que repetía, en
algún lugar de la montaña: -¡Aaaaaayyyy!
Con curiosidad, el niño gritó: ¿Quién está ahí? Y recibió
esta respuesta: -¿Quién está ahí? Enojado, gritó: -
¡Cobarde! Y escuchó: ¡Cobarde!
El niño miró al padre y le preguntó: ¿Qué sucede, papá? El
hombre, sonriendo, le dijo: Hijo mío, presta atención -Y
gritó hacia la montaña: ¡Te admiro! Y la voz le respondió: -
¡Te admiro!
7. De nuevo, el hombre gritó: -¡Eres un campeón! Y la voz
le respondió: -¡Eres un campeón!
El niño estaba asombrado, pero no entendía nada.
Entonces el padre le explicó: -La gente lo llama eco,
pero en realidad es la vida. Te devuelve todo lo que
dices o haces.
Nuestra vida es simplemente un reflejo de nuestras
acciones. Si desea más amor en el mundo, cree más
amor a su alrededor. Si anhela felicidad, dé felicidad a
quienes lo rodean. Si quiere una sonrisa en el alma, dé
una sonrisa al alma de las personas que conoce.
8. Nuestra vida es simplemente un reflejo de nuestras
acciones. Si desea más amor en el mundo, cree más
amor a su alrededor. Si anhela felicidad, dé felicidad
a quienes lo rodean. Si quiere una sonrisa en el
alma, dé una sonrisa al alma de las personas que
conoce.
Esto se aplica a todos los aspectos de la vida. Ella
nos da de regreso exactamente lo que le hemos
dado. Nuestra vida no es una coincidencia, sino un
reflejo de nosotros mismos.
10. "No hagas planes pequeños; no tienen esa fuerza
que empuja tu sangre y lo más seguro es que no se
lleven a cabo. Planea a lo grande; busca la
excelencia en tu trabajo, tomando en cuenta
que una vez registrado en tu mente el diagrama
noble y lógico no muere."
Daniel H. Burnham
11. Creer en aquellas
"
cosas que podemos
ver y tocar
no es creer, pero
creer en lo que no
podemos ver
es un triunfo y una
bendición."
Abraham Lincoln
12. Pero si te
conviene cambiar, para
poder estar mejor,
porque
así lo has
estado buscando desde
hace algún tiempo,
¿por qué no hacerlo? Si
siempre será en
función de mejorar
todo lo que está en ti y
lo que está en tu
entorno y depende de
tus pensamientos
13. Somos los viajeros de una travesía cósmica -polvo de estrellas
danzando y girando en las corrientes y los torbellinos del
infinito. La vida es eterna, pero las expresiones de la vida son
efímeras, momentáneas, transitorias. Esta existencia nuestra es
tan transitoria como las nubes del otoño.
Observar el nacimiento y la muerte de los seres es como mirar
los movimientos de una danza. Una vida es como un relámpago
en el cielo, que se desliza veloz como un torrente por la
pendiente de una montaña. Nos hemos detenido
momentáneamente para encontrarnos unos a otros, para
conocernos, amarnos y compartir.
Este es un momento precioso, pero transitorio. Es un pequeño
paréntesis en la eternidad. Si compartimos con cariño, alegría y
amor, crearemos abundancia y alegría para todos. Y entonces
este momento habrá valido la pena.