2. Las tecnologías de la información y la
comunicación (TIC), a veces denominadas
nuevas tecnologías de la información y la
comunicación (NTIC) son un concepto muy
asociado al de informática. Si se entiende esta
última como el conjunto de
recursos, procedimientos y técnicas usadas en el
procesamiento, almacenamiento y transmisión
de información, esta definición se ha matizado
de la mano de las TIC, pues en la actualidad no
basta con hablar de una computadora cuando
se hace referencia al procesamiento de la
información.,
3. Internet puede formar parte de ese procesamiento
que, quizás, se realice de manera distribuida y
remota. Y al hablar de procesamiento
remoto, además de incorporar el concepto
de telecomunicación, se puede estar haciendo
referencia a un dispositivo muy distinto a lo que
tradicionalmente se entiende por computadora
pues podría llevarse a cabo, por ejemplo, con un
teléfono móvil o una computadora ultra-
portátil, con capacidad de operar en red y con
cada vez más prestaciones, facilidades y
rendimiento.
4. Se pueden considerar las tecnologías de la
información y la comunicación como un
concepto dinámico. Por ejemplo, a finales del
siglo XIX el teléfono podría ser considerado una
nueva tecnología según las definiciones
actuales. Esta misma consideración podía
aplicarse a la televisión cuando apareció y se
popularizó en la década de los '50 del siglo
pasado. Sin embargo, estas tecnologías hoy no
se incluirían en una lista de las TIC y es muy
posible que actualmente los ordenadores ya no
puedan ser calificados como nuevas
tecnologías. A pesar de esto
5. , en un concepto amplio, se puede
considerar que el teléfono, la
televisión y el ordenador forman parte
de lo que se llama TIC en tanto que
tecnologías que favorecen la
comunicación y el intercambio de
información en el mundo actual.
6. La elección, desarrollo y uso de
tecnologías puede tener impactos muy
variados en todos los órdenes del quehacer
humano y sobre la naturaleza. Uno de los
primeros investigadores del tema
fue Maculan, quien planteó las siguientes
cuatro preguntas a contestar sobre cada
tecnología particular:16
¿Qué genera, crea o posibilita?
¿Qué preserva o aumenta?
¿Qué recupera o revaloriza?
¿Qué reemplaza o deja obsoleto?
7. Impacto práctico: ¿Para qué sirve? ¿Qué
permite hacer que sin ella sería imposible?
¿Qué facilita?
Impacto simbólico: ¿Qué simboliza o
representa? ¿Qué connota?
Impacto tecnológico: ¿Qué objetos o
saberes técnicos preexistentes lo hacen
posible? ¿Qué reemplaza o deja obsoleto?
¿Qué disminuye o hace menos probable?
¿Qué recupera o revaloriza? ¿Qué
obstáculos al desarrollo de otras
tecnologías elimina?
Impacto ambiental: ¿El uso de qué recursos
aumenta, disminuye o reemplaza? ¿Qué
residuos o emanaciones produce? ¿Qué
efectos tiene sobre la vida animal y
vegetal?
9. Cada cultura distribuye de modo
diferente la realización de
las funciones y el usufructo de sus
beneficios. Como la introducción de
nuevas tecnologías modifica y
reemplaza funciones humanas, cuando
los cambios son suficientemente
generalizados puede modificar también
las relaciones humanas, generando un
nuevo orden social. Las tecnologías no
son independientes de la
cultura, integran con ella un sistema
socio-técnico inseparable
10. La era digital se ha instalado definitivamente
entre nosotros, y como cada revolución
tecnológica suscita miedos, alienta
esperanzas, crea industrias y genera nuevas
palabras. Examinar críticamente las promesas
que nos traen las nuevas tecnologías -sin
desaprovechar su potencial- parece un modo
prudente de adentrarse en la sociedad de la
información. Para que la revolución digital
deje de ser -para amplios sectores- una
promesa, es necesario no sólo poder
acceder, sino también conocer críticamente y
aplicar creativamente las nuevas tecnologías
11. Para que la revolución digital deje de ser
-para amplios sectores- una promesa, es
necesario no sólo poder acceder, sino
también conocer críticamente y aplicar
creativamente las nuevas tecnologías .
Las nuevas tecnologías -al contrario de
lo que sostienen los discursos
apocalípticos- pueden contribuir de
modo decisivo a la cooperación
internacional, a la paz, a la defensa de
nuestra lengua y a extender el acceso a
los bienes culturales, pero en la medida
en que las
12. condiciones de su diseño y utilización no se
dejen libradas sólo a la propia inercia del
proceso de innovación tecnológica. Hay que
apropiarse de la tecnología con prudencia y
con sobriedad, superando las actitudes propias
de la tecnófoba recalcitrante y del fetichismo
tecnológico. Para ello no basta la distribución
masiva de ordenadores en las aulas, se requiere
además hacer con urgencia una amplia
pedagogía social del uso y de la producción de
nuevos medios. Una de las manifestaciones más
evidentes de la cultura digital es la
transformación del lenguaje cotidiano.
13. El rápido desarrollo de las tecnologías de la
información y las comunicaciones y la
innovación de los sistemas digitales
representan una revolución, que ha
cambiado fundamentalmente la manera en
que la gente
piensa, actúa, comunica, trabaja y gana su
sustento. La llamada revolución digital ha
forjado nuevas modalidades de crear
conocimientos, educar a la población y
transmitir información
14. . Ha reestructurado la forma en que los
países hacen negocios y rigen su
economía, se gobiernan y comprometen
políticamente. Ha proporcionado la
entrega rápida de ayuda humanitaria y
asistencia sanitaria, y una nueva visión de
protección del medio ambiente. Y hasta
ha creado nuevas formas de
entretenimiento y ocio. Puesto que el
acceso a la información y los
conocimientos es un requisito previo para
conseguir los Objetivos de Desarrollo del
Milenio (ODM)