2. Los chemtrails son un supuesto fenómeno que
consiste, según los convencidos de su
existencia, en que algunas estelas de
condensación dejadas por aviones no son tales,
sino que en realidad están compuestas por
productos químicos. La existencia de dichos
chemtrails no está generalmente aceptada, así
como los fines que se perseguirían con los
mismos, si bien casi todas las hipótesis de esta
teoría de conspiración coinciden en que su
objetivo sería causar algún tipo de daño a la
población.
3. Se trataría de una
práctica conocida por
unos pocos, quedando
fuera de este término
la dispersión de
sustancias químicas
para fines reconocidos
(fumigación, sembrad
o de
nubes, exhibiciones
aéreas, etc.).
4. El término "chemtrail" es una abreviación del término
inglés chemical trail, que traducido literalmente
significa estela química. La denominación imita a la
que se da en este idioma a las estelas de condensación
(contrail).
El vocablo fue utilizado por primera vez por el
periodista William Thomas en 1999, aunque la primera
descripción del fenómeno data de 1997, por Richard
Finke. Algunos partidarios de esta teoría defienden que
las chemtrails comenzaron años antes.
La comunidad científica se muestra escéptica respecto
a la existencia de las chemtrails y considera que se trata
bien de estelas de condensación, o bien de cirros.
5. Los defensores de esta teoría afirman que los
chemtrails se diferencian de las estelas de
condensación normales en que son más gruesas y
persisten durante mucho más tiempo, durante el
cual se expanden. A menudo se generarían
cruzándose en el cielo unas con otras, formando
patrones hasta llegar a cubrir por completo el cielo
con un "falso" cirroestrato.
Los partidarios de la teoría aseguran que esta
práctica se da con una frecuencia creciente, a la vez
que se expande también la red de quienes
denuncian su existencia.
6. Entre quienes denuncian la existencia de las
chemtrails hay quien recomienda el uso de
orgonita contra éstas. La orgonita es una
mezcla de virutas de metal, cuarzo y resina de
poliéster que, supuestamente, potencia la
energía orgónica positiva y sirve para eliminar
un amplio abanico de males y agentes nocivos.
El dispositivo de orgonita utilizado para
eliminar las chemtrails es conocido
generalmente como cloudbuster y consiste en
unos seis tubos de cobre de unos dos metros de
largo, clavados en un cubo lleno de orgonita.
7. Los defensores de esta tecnología se
basan en las ideas de Wilhelm Reich
Sin embargo, la teoría de la energía
orgónica no cuenta con evidencia alguna
que respalde su existencia o supuestos
efectos, y es considerada pseudociencia,
siendo una variante más de las diversas
propuestas de energía vital, al igual que
el mesmerismo o el élan vital.
8. Los críticos argumentan que, dada la magnitud de
la supuesta operación para producir chemtrails,
sería necesaria la implicación de un gran número
de individuos. Además, muchos chemtrails
provienen de aviones civiles, lo que hace aún más
difícil mantener el secreto. Para contrarrestar este
argumento, algunos sugieren que los productos
químicos pueden ser añadidos deliberadamente al
combustible sin que el piloto tenga conciencia del
mismo. La Fuerza Aérea de los Estados Unidos
(USAF) ha afirmado que su única unidad capaz de
efectuar fumigaciones es la 910, que emplea para
ello aviones C-130 Hercules.
9. En los cirros -
especialmente en los
cirroestratos- es normal
que se produzcan
irisaciones. De hecho, la
Organización
Meteorológica Mundial,
en su Atlas de Nubes de
1975, ya mencionaba
que las estelas de
condensación eran
capaces de generar
irisaciones de colores
excepcionales.
10. En contra de la creencia de que las contrails no
puedan durar mucho tiempo está la mención en el
"Atlas de Nubes" de la Organización
Meteorológica Mundial del año 1975, en la que
puede leerse lo siguiente de las estelas de
condensación:
[...] A menudo tienen vida corta, pero en
particular, cuando están presentes cirrus o
cirroestratus, pueden persistir durante varias
horas. Las estelas persistentes se dispersan
progresivamente [...] a veces es imposible
distinguir entre estelas viejas y estas nubes.