Este documento presenta la homilía de un domingo de Adviento. Se enfoca en la necesidad de tener "ojos de amor" para poder ver a Dios en Jesús y en los demás. Explica que para descubrir al Hijo de Dios se necesita mirar al cielo hacia Dios y también estar muy cerca de los demás con amor, no alcanza con instrumentos como telescopios. San José tuvo estos ojos de amor y pudo descubrir lo que Dios le pedía. La homilía concluye orando para que Dios nos dé esos

1. 4to
Domingo de Adviento. Ciclo A
“LOS OJOS DEL AMOR”
Día 18 de diciembre del 2016
MONICIÓN DE ENTRADA
Nos estamos
acercando a la
importante celebración
del nacimiento de
Jesús.
El niño pequeño que
nace en Belén se
convierte para el
pueblo oprimido y
creyente en signo de la cercanía de Dios que quiere mostrarnos su vida y su salvación.
CANTO DE ENTRADA

2. PRIMERA LECTURA
Mirad, la virgen está embarazada
Lectura del libro de Isaías 7, 10-14
El Señor habló a Ajaz en estos términos: «Pide para ti un signo de parte del Señor, en lo
profundo del Abismo, o arriba, en las alturas.» Pero Ajaz respondió: «No lo pediré ni
tentaré al Señor.»
Isaías dijo: «Escuchen, entonces, casa de David: ¿Acaso no les basta cansar a los
hombres, que cansan también a mi Dios? Por eso el Señor mismo les dará un signo. Miren,
la joven está embarazada y dará a luz un hijo, y lo llamará con el nombre de Emanuel.»
Palabra de Dios.
SALMO 23, 1-2. 3-4ab. 5-6
R. Va a entrar el Señor, el rey de la gloria.
Del Señor es la tierra y todo lo que hay en ella,
el mundo y todos sus habitantes
porque él la fundó sobre los mares,
él la afirmó sobre las corrientes del océano. R.
¿Quién podrá subir a la Montaña del Señor
y permanecer en su recinto sagrado?
El que tiene las manos limpias y puro el corazón;
el que no rinde culto a los ídolos. R.
El recibirá la bendición del Señor,
la recompensa de Dios, su salvador.
Así son los que buscan al Señor,
los que buscan tu rostro, Dios de Jacob. R.
ALELUIA Mt 1, 23
Aleluia.
La virgen concebirá y dará a luz un hijo
a quien pondrán el nombre de Emanuel,
Dios con nosotros.
Aleluia.

3. Jesús nacerá de María,
comprometida con José, hijo de David
+ Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo 1, 18-24
Jesucristo fue engendrado así:
María, su madre, estaba comprometida con José y, cuando todavía no habían vivido
juntos, concibió un hijo por obra del Espíritu Santo. José, su esposo, que era un hombre
justo y no quería denunciarla públicamente, resolvió abandonarla en secreto.
Mientras pensaba en esto, el Ángel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: «José,
hijo de David, no temas recibir a María, tu esposa, porque lo que ha sido engendrado en
ella proviene del Espíritu Santo. Ella dará a luz un hijo, a quien pondrás el nombre de
Jesús, porque él salvará a su Pueblo de todos sus pecados.»
Todo esto sucedió para que se cumpliera lo que el Señor había anunciado por el
Profeta: La Virgen concebirá y dará a luz un hijo a quien pondrán el nombre de Emanuel,
que traducido significa: «Dios con nosotros.»
Al despertar, José hizo lo que el Ángel del Señor le había ordenado: llevó a María a su
casa.
Palabra del Señor.
¡ALEGRÍA! ¡LLEGA EL SALVADOR!
RECURSO
Podemos comenzar con estas preguntas:
¿Podemos con nuestros ojos ver todo lo que queremos?
Si queremos ver algo que está bien lejos, ¿qué usamos? ¿O algo que es muy pequeñito?
O, ¿qué tenemos que usar si queremos ver lo que hay adentro de nuestro cuerpo o de algo
que está cerrado?
Que los chicos vayan diciendo las distintas cosas que podemos usar para ver mejor.
Pero ¿Qué nos hará falta ahora para poder ver al hijo de Dios? Algo que nos ayude a ver
bien lejos y a la vez bien cerca.
¿Alcanza con un telescopio con el que podemos mirar bien lejos, hasta el cielo, o un
microscopio o una lupa, con los que podemos mirar hasta los detalles más pequeños?. ¿Y
unos anteojos bifocales, que sirven para ver lejos y también para ver de cerca?.
SUGERENCIAS PARA LA PREDICACIÓN
+ Recordamos el Evangelio.
+ Dialogo con los chicos: ¿qué nos hará falta para poder ver al Hijo de Dios?
+ Para descubrir a Jesús tenemos que tener los ojos en el cielo, en Dios, muy junto a Él y
también muy cerca de los demás. Y esos son los ojos del amor. Pero para eso no sirven ni
los telescopios, ni los microscopios, ni los rayos X. Hacen falta los ojos del amor.
+Cuando estamos muy cerca de Dios, estos ojos llenos de amor, nos ayudan a descubrir
cuanto amor quiere Él regalarnos y dónde lo podemos ofrecer.
+San José tenía los ojos llenos de amor. Quería tanto a Dios que descubrió lo que le pedía
para ayudar a los hombres a alcanzar la salvación.
+ Jesús nace en cada gesto donde el amor de Dios está presente.

4. ORACIÓN COLECTA
Padre Bueno,
regálanos ojos de ternura,
para descubrir que en cada gesto de amor
Jesús está presente en medio nuestro.
Él que vive y reina contigo
en la unidad del Espíritu Santo
y es Dios, por los siglos de los siglos.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS:
Padre del Cielo
recibe nuestro corazón
junto a este pan y este vino,
y danos los ojos del amor
que necesitamos para descubrirte.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios y Padre nuestro,
gracias porque Jesús va a nacer entre nosotros,
ayúdanos a tener los ojos llenos de amor
para que también nazca en nuestros corazones.
Él que vive y reina por los siglos de los siglos.