El documento discute los desafíos para los operadores móviles en América Latina, incluyendo encontrar un equilibrio entre nuevos servicios, tecnología, inversionistas, clientes y el estado para lograr la universalización. También analiza si los marcos regulatorios son adecuados para atraer inversión y permitir que los operadores introduzcan nuevas tecnologías mientras mantienen los objetivos de universalización.