PINTURA DEL RENACIMIENTO EN ESPAÑA (SIGLO XVI).ppt
El otro occidente Marcello Carmagnani
1. El otro Occidente MarcelloCarmagnani
América Latina desde la invasión europea hasta la globalización
El libro el otro Occidente explica aludiendo a América Latina, explica desde este
encuentro entre los peninsulares y América y las transformaciones ocurridas que
obviamente empieza desde el siglo XV específicamente en 1492 y que continua
en el presente llamándolo el autor como una occidentalización. En el libro se
explica como este “mestizaje” no solo de raza sino de modos de vidas, creencias,
organizaciones sociales, leyes y costumbres, políticas y económicas van
moldeando a una América Latina con transformaciones hasta llegar a una
civilización occidental. Estos son procesos que empieza con una inserción y una
invasiónpuede haber sido que han ayudado y/o favorecido u obstaculizado en
ámbito de las interacciones económicas, sociales, políticas y culturales para asi
las comunidades puedan ser actores activos en este proceso de occidentalización
para una mejor evolución generando una red de interacciones ya sean religiosas
que vienen del otro mundo hasta acá, también la misma lengua castellana con la
de nativos de América y bueno, toda la cultura material o la misma emigración. Por
eso mismo podemos hablar de un producto de participación de todos los actores
generando fuerzas dinámicas.
La historia de la occidentalización de América Latina abarcando un amplio
espectro temporal y geográfico, posee la particularidad de ofrecer nuevas
dimensiones analíticas. En primer lugar, permite matizar las historias nacionalistas
de cada país ya conformado ya sea de México y hasta la del rincón como lo es
Chile y acá se puede hacer una crítica en las que a veces las identidades se crean
como si fueran únicas e irrepetibles, es decir algunos elementos solo son locales
desvinculándose con otras historias y otras localidades. Otra que caracteriza
Carmagnani es que más allá de las influencias o copia de modelos de europa ya
Latinoamérica le debía todos esos acontecimientos como parte de su historia,
creando puentes culturales conformados por historia de dos mundos
Su objetivo central radica en mostrar y subrayar las interacciones económicas,
sociales, políticas y culturales entre ambos mundos puesto que, según
2. Carmagnani, fueron justamente dichas interacciones las que instaron a los
latinoamericanos, por lo que la occidentalización no tiene nada que ver con lo
teológico, que no se trata de un fenómeno único e idéntico en el tiempo, ni es
independiente de la voluntad de los protagonistas y de las dinámicas nacionales e
internacionales. Se trata, desde luego, de un proceso dotado de una historicidad
muy fuerte. Este libro, por lo tanto, no sólo analiza de qué manera América Latina
se vuelve occidental, sino más bien cómo el subcontinente y el mundo inventaron
un recorrido que acercó las áreas latinoamericanas a las ibéricas y occidentales, y
cómo todas ellas se vieron sometidas a un influjo recíproco. Se describe entonces
un proceso más que definir estáticamente la homologación de América Latina a
los estándares europeos y norteamericanos. Se intenta mostrar cómo los
latinoamericanos y los no latinoamericanos fueron creando gradualmente la
convergencia de las áreas americanas y europeas en torno a determinadas formas
de comportamiento y de organización social, normas jurídicas, formas políticas y
mecanismos económicos y sociales comunes, hasta llegar a la occidentalización.
Una parte importante del libro gira en torno a los "obstáculos" o "dificultades" por
las cuales pasó el subcontinente en su proceso de occidentalización. En la medida
en que América Latina se adscriba a una "política común con Europa" o que
asuma un orden constitucional basado en la "soberanía nacional" y "unidad
interna", se acerca al modelo occidental. Aquí, según mi parecer, Europa no solo
conforma un punto de referencia para el autor, sino también un punto de arribo.
Carmagnani opta por una historia global antes que estudiar realidades históricas
particulares. A partir de tales posiciones, el autor intenta ir más allá de lo
eurocéntrico, destacando la presencia ejercida por el mundo latinoamericano, en
la medida que este ha influido "...positivamente en la evolución del mundo
occidental" (p. 9). El texto se divide en cinco capítulos. El primero trata de la
inserción latinoamericana a partir de la llegada europea al Nuevo Mundo,
destacando la convergencia de las áreas americanas en el contexto ibérico.El
segundo capítulo se concentra en el mundo ibérico, incluida la América Hispana,
describiendo los componentes de dicho espacio geocultural (mestizaje,
3. transformaciones económicas, sociales y culturales, nuevas cotidianidades,
etc.).El tercer capítulo titulado "La reactivación", aborda el panorama de los siglos
XVIII al XIX tanto en España como en América: la inserción mundial del
mundo ibérico, la independencia de los países americanos, el surgimiento de un
nuevo orden económico, político y social.El cuarto capítulo analiza el "mundo
euroamericano"a partir del estudio de América Latina “ya independiente” en el
concierto internacional: su participación en el comercio internacional y el orden
político liberal y republicano que lo caracterizó.
Por último el último capítulo que sintetiza todo el libro titula "La occidentalización".
Aquí Carmagnani aborda la "evolución" del mundo latinoamericano desde el
segundo tercio del siglo XX, destacando el análisis de sus múltiples oscilaciones
entre, por una parte, su proyección internacional y, por otra, sus períodos de
aislamiento, los que la llevaron incluso hasta a negar "su matriz occidental"
Quizás una crítica al libro, ya que como es una reseña este autor, pese a que
habla demasiado como esta occidentalización habla mucho de el proceso, pero
nunca explica en si que es la occidentalización, sobre que ha atravesado en la
historia de América Latina.
Finalmente cabe destacar que un elemento que rescata Carmagnani es cierta
"matriz" cultural que vincula a América Latina con el mundo occidental. El hecho
de que el subcontinente participe del mundo cristiano le otorga ciertas ventajas,
mismas que no poseen o gozan los musulmanes, los animistas africanos o
hindúes.¿Esto quiere decir que aquellos elementos no católicos o europeos son
un impedimento a la occidentalización de América Latina? ¿Dónde incluir aquí a
los otros grupos, como los amerindios, afroamericanos, mestizos? ¿Qué decir de
las posiciones antioccidente de aquellos grupos, representados en parte en el
siglo XX por Rigoberta Menchú o el movimiento de los Zapatistas? Carmagnani
afirma que la"...occidentalización de las áreas latinoamericanas se configura (...)
como el producto de la participación de todos los actores que generan fuerzas
4. dinámicas, ya sea de aquellos que desde Europa se proyectan hacia el contexto
latinoamericano, ya sea de los que se vuelcan a la escena internacional desde el
subcontinente" Habría que asumir que entre estos actores que "generan fuerzas
dinámicas" no se incluye a los grupos antes mencionados. La occidentalización,
en este sentido, correspondería a un esfuerzo de las élites criollas, más que al
conjunto de la sociedad. Son estos actores quienes poseen la "matriz" adecuada y
los que en definitiva logran insertarse, vía comercio internacional y apropiación de
ideas, en el mundo occidental.
HÉCTOR URRUTIA ORTEGA 2131999563