3. A medida que se comienza
a hacer scroll, el negro
comienza a perder
opacidad, dando paso al
aparecer de un conjunto de
tramas.
4. A medida que se comienza
a hacer scroll, el negro
comienza a perder
opacidad, dando paso al
aparecer de un conjunto de
tramas.
5. A medida que se comienza
a hacer scroll, el negro
comienza a perder
opacidad, dando paso al
aparecer de un conjunto de
tramas.
6. Segundo Momento.
A medida que se comienza
a hacer scroll, el negro
comienza a perder
opacidad, dando paso al
aparecer de un conjunto de
tramas.
7. Una vez que el negro
desparece por completo,
las tramas se muestran de
manera completa.
Una vez que el negro
desparece por completo,
las tramas se muestran de
manera completa.
8. Apertura de los Terrenos
Texto dicho en el ágora del día 7 de Enero de 1971. Tras oírlo, los asistentes
fueron a las arenas de la Ciudad Abierta. Sobre ellas almorzaron. Los manteles se
transformaron en banderas multicolores unidas a múltiples astas. Se llegó hasta la orilla
y cada asistente, portador de una bandera se unió a su vecino, distante diez pasos, con
una cinta atada a las astas. Todo ese frente avanzó desde la orilla hacia la tierra, cara a
cara al mar interior de América.
A medida que se continúa
haciendo scroll, las tramas
comienzan a desaparecer
y un texto introductorio
empieza a adquirir
mayot espacialidad y
protagonismo (se insinúa).
9. Apertura de los Terrenos
Texto dicho en el ágora del día 7 de Enero de 1971. Tras oírlo, los asistentes
fueron a las arenas de la Ciudad Abierta. Sobre ellas almorzaron. Los manteles se
transformaron en banderas multicolores unidas a múltiples astas. Se llegó hasta la orilla
y cada asistente, portador de una bandera se unió a su vecino, distante diez pasos, con
una cinta atada a las astas. Todo ese frente avanzó desde la orilla hacia la tierra, cara a
cara al mar interior de América.
A medida que se continúa
haciendo scroll, las tramas
comienzan a desaparecer
y un texto introductorio
empieza a adquirir
mayot espacialidad y
protagonismo (se insinúa).
10. Apertura de los Terrenos
Texto dicho en el ágora del día 7 de Enero de 1971. Tras oírlo, los asistentes
fueron a las arenas de la Ciudad Abierta. Sobre ellas almorzaron. Los manteles se
transformaron en banderas multicolores unidas a múltiples astas. Se llegó hasta la orilla
y cada asistente, portador de una bandera se unió a su vecino, distante diez pasos, con
una cinta atada a las astas. Todo ese frente avanzó desde la orilla hacia la tierra, cara a
cara al mar interior de América.
A medida que se continúa
haciendo scroll, las tramas
comienzan a desaparecer
y un texto introductorio
empieza a adquirir
mayot espacialidad y
protagonismo (se insinúa).
11. Apertura de los Terrenos
Texto dicho en el ágora del día 7 de Enero de 1971. Tras oírlo, los asistentes
fueron a las arenas de la Ciudad Abierta. Sobre ellas almorzaron. Los manteles se
transformaron en banderas multicolores unidas a múltiples astas. Se llegó hasta la orilla
y cada asistente, portador de una bandera se unió a su vecino, distante diez pasos, con
una cinta atada a las astas. Todo ese frente avanzó desde la orilla hacia la tierra, cara a
cara al mar interior de América.
En un punto todas las
tramas desaparecen,
mientras que el texto se
muestra por completo.
12. Apertura de los Terrenos
Texto dicho en el ágora del día 7 de Enero de 1971. Tras oírlo, los asistentes
fueron a las arenas de la Ciudad Abierta. Sobre ellas almorzaron. Los manteles se
transformaron en banderas multicolores unidas a múltiples astas. Se llegó hasta la orilla
y cada asistente, portador de una bandera se unió a su vecino, distante diez pasos, con
una cinta atada a las astas. Todo ese frente avanzó desde la orilla hacia la tierra, cara a
cara al mar interior de América.
Tercer Momento.
En un punto todas las
tramas desaparecen,
mientras que el texto se
muestra por completo.
13. Apertura de los Terrenos
Texto dicho en el ágora del día 7 de Enero de 1971. Tras oírlo, los asistentes
fueron a las arenas de la Ciudad Abierta. Sobre ellas almorzaron. Los manteles se
transformaron en banderas multicolores unidas a múltiples astas. Se llegó hasta la orilla
y cada asistente, portador de una bandera se unió a su vecino, distante diez pasos, con
una cinta atada a las astas. Todo ese frente avanzó desde la orilla hacia la tierra, cara a
cara al mar interior de América.
Al continuar haciendo
scroll, el texto introductorio
se comienza a difuminar.
14. Apertura de los Terrenos
Texto dicho en el ágora del día 7 de Enero de 1971. Tras oírlo, los asistentes
fueron a las arenas de la Ciudad Abierta. Sobre ellas almorzaron. Los manteles se
transformaron en banderas multicolores unidas a múltiples astas. Se llegó hasta la orilla
y cada asistente, portador de una bandera se unió a su vecino, distante diez pasos, con
una cinta atada a las astas. Todo ese frente avanzó desde la orilla hacia la tierra, cara a
cara al mar interior de América.
Al continuar haciendo
scroll, el texto introductorio
se comienza a difuminar.
15. El acto tomó esta forma. Todos quedaron sin
ojos. Fueron vendados a excepción hecha de uno
que guiaba el grupo ciego. Esto traía consigo la
absoluta disponibilidad, es decir, la desorientación
cabal porque nadie veía nada y una fianza total
en quien lo guiaba. A quien entraba en tal juego
Primer Acto Poético
Cuarto Momento.
A medida que el texto del
primer acto comienza a
correr desde abajo hacia
arriba, detrás, las capas de
un croquis correspondiente
al inicio del recorrido
comienza a aparecer. Este
aparecer es paulatino,
aumentando su opacidad
al mismo tiempo que
otras capaz comienzan a
aparecer.
16. Primer Acto Poético
El orden propio de esta Phalène fue muy simple. Se
trata de alcanzar los terrenos de la ciudad abierta y
en ese intento tropezar, reconocer, dar con el límite.
El camino se intentó por la parte alta de los cerros y
se descubrió que por allí no había acceso. El cortejo
El acto tomó esta forma. Todos quedaron sin
ojos. Fueron vendados a excepción hecha de uno
que guiaba el grupo ciego. Esto traía consigo la
absoluta disponibilidad, es decir, la desorientación
cabal porque nadie veía nada y una fianza total
en quien lo guiaba. A quien entraba en tal juego
se le creaba un estado de suspensión, que en la
simple historia diaria se guarece en un juego de
niños, el juego de la gallina ciega. El estado de
suspensión, en la absoluta disponibilidad y fianza,
provoca corporalmente el estado de arjé, que no
es palpablemente un principio, sino más allá de la
Cuarto Momento.
A medida que el texto del
primer acto comienza a
correr desde abajo hacia
arriba, detrás, las capas de
un croquis correspondiente
al inicio del recorrido
comienza a aparecer. Este
aparecer es paulatino,
aumentando su opacidad
al mismo tiempo que
otras capaz comienzan a
aparecer.
17. El acto tomó esta forma. Todos quedaron sin
ojos. Fueron vendados a excepción hecha de uno
que guiaba el grupo ciego. Esto traía consigo la
absoluta disponibilidad, es decir, la desorientación
cabal porque nadie veía nada y una fianza total
en quien lo guiaba. A quien entraba en tal juego
se le creaba un estado de suspensión, que en la
simple historia diaria se guarece en un juego de
niños, el juego de la gallina ciega. El estado de
suspensión, en la absoluta disponibilidad y fianza,
provoca corporalmente el estado de arjé, que no
es palpablemente un principio, sino más allá de la
voluntad, el intelecto, la imaginación, la memoria y
el instinto, una inescrutable vigilia.
Primer Acto Poético
El orden propio de esta Phalène fue muy simple. Se
trata de alcanzar los terrenos de la ciudad abierta y
en ese intento tropezar, reconocer, dar con el límite.
El camino se intentó por la parte alta de los cerros y
se descubrió que por allí no había acceso. El cortejo
fue detenido por una quebrada inatravesable y que
es a la vez uno de los pocos lugares donde el paisaje
de la zona es aún originario. Es el paisaje que vio el
propio Darwin. Una quebrada agreste sembrada de
Cuarto Momento.
A medida que el texto del
primer acto comienza a
correr desde abajo hacia
arriba, detrás, las capas de
un croquis correspondiente
al inicio del recorrido
comienza a aparecer. Este
aparecer es paulatino,
aumentando su opacidad
al mismo tiempo que
otras capaz comienzan a
aparecer.
18. niños, el juego de la gallina ciega. El estado de
suspensión, en la absoluta disponibilidad y fianza,
provoca corporalmente el estado de arjé, que no
es palpablemente un principio, sino más allá de la
voluntad, el intelecto, la imaginación, la memoria y
el instinto, una inescrutable vigilia.
en ese intento tropezar, reconocer, dar con el límite.
El camino se intentó por la parte alta de los cerros y
se descubrió que por allí no había acceso. El cortejo
fue detenido por una quebrada inatravesable y que
es a la vez uno de los pocos lugares donde el paisaje
de la zona es aún originario. Es el paisaje que vio el
propio Darwin. Una quebrada agreste sembrada de
Cuarto Momento.
A medida que el texto del
primer acto comienza a
correr desde abajo hacia
arriba, detrás, las capas de
un croquis correspondiente
al inicio del recorrido
comienza a aparecer. Este
aparecer es paulatino,
aumentando su opacidad
al mismo tiempo que
otras capaz comienzan a
aparecer.
19. el instinto, una inescrutable vigilia. es a la vez uno de los pocos lugares donde el paisaje
de la zona es aún originario. Es el paisaje que vio el
propio Darwin. Una quebrada agreste sembrada de
Cuarto Momento.
A medida que el texto del
primer acto comienza a
correr desde abajo hacia
arriba, detrás, las capas de
un croquis correspondiente
al inicio del recorrido
comienza a aparecer. Este
aparecer es paulatino,
aumentando su opacidad
al mismo tiempo que
otras capaz comienzan a
aparecer.
21. Una vez que todas las
capaz del croquis aparecen,
el color comienza a perder
opacidad, al igual que las
tramas.
22.
23.
24. Quinto Momento
A medida que las tramas
pierden opacidad, al
mismo tiempo comienzan
a aparecer las tramas de
otros croquis, también
de manera paulatina,
tanto en su opacidad
como en el número de
capaz, genernado así un
entramado característico
del lugar.
25. Quinto Momento
A medida que las tramas
pierden opacidad, al
mismo tiempo comienzan
a aparecer las tramas de
otros croquis, también
de manera paulatina,
tanto en su opacidad
como en el número de
capaz, genernado así un
entramado característico
del lugar.
26. Quinto Momento
A medida que las tramas
pierden opacidad, al
mismo tiempo comienzan
a aparecer las tramas de
otros croquis, también
de manera paulatina,
tanto en su opacidad
como en el número de
capaz, genernado así un
entramado característico
del lugar.
27. Quinto Momento
A medida que las tramas
pierden opacidad, al
mismo tiempo comienzan
a aparecer las tramas de
otros croquis, también
de manera paulatina,
tanto en su opacidad
como en el número de
capaz, genernado así un
entramado característico
del lugar.
28. Quinto Momento
A medida que las tramas
pierden opacidad, al
mismo tiempo comienzan
a aparecer las tramas de
otros croquis, también
de manera paulatina,
tanto en su opacidad
como en el número de
capaz, genernado así un
entramado característico
del lugar.
29. Sexto Momento
Finalmente el croquis
anterior desparece por
completo, generando así,
el poder reconocer un
segundo croquis.
30. Al igual que el croquis
anterior, el aparecer de
este culmina con la última
capa correspondiente al
color.
32. palmeras propias de la zona, situada a menos de un
kilómetro a espaldas del centro de la ciudad de Viña
del Mar. Se llegó allí.
Todos los vendados fueron alineados. Tras un
lo que quieran”. El lugar era proporcionado, ceñido,
apretado. Allí todos jugamos y el juego mismo,
absolutamente libre, nos mostró que estábamos
todos cerca pero nunca ninguno pudo o supo estar
Séptimo Momento
A medida que las capaz
comienzan a perder
opacidad,estas tambien
desaparecen una a una de
manera paulatina, todo
esto al mismo tiempo que
la continuación del Primer
Acto de la “Apertura de
los Terrenos” comienza
a correr de arriba hacia
abajo.
33. palmeras propias de la zona, situada a menos de un
kilómetro a espaldas del centro de la ciudad de Viña
del Mar. Se llegó allí.
Todos los vendados fueron alineados. Tras un
silencio, que permitiera la expansión de los sonidos
del lugar, se pidió que se desvendaran los ojos.
Todos se reconocieron detenidos al borde mismo
lo que quieran”. El lugar era proporcionado, ceñido,
apretado. Allí todos jugamos y el juego mismo,
absolutamente libre, nos mostró que estábamos
todos cerca pero nunca ninguno pudo o supo estar
junto. Allí caímos en la cuenta que podíamos estar
cerca, reencontrándonos, tras la desorientación,
cerca los unos de los otros pero que no dependía de
Séptimo Momento
A medida que las capaz
comienzan a perder
opacidad,estas tambien
desaparecen una a una de
manera paulatina, todo
esto al mismo tiempo que
la continuación del Primer
Acto de la “Apertura de
los Terrenos” comienza
a correr de arriba hacia
abajo.
34. palmeras propias de la zona, situada a menos de un
kilómetro a espaldas del centro de la ciudad de Viña
del Mar. Se llegó allí.
Todos los vendados fueron alineados. Tras un
silencio, que permitiera la expansión de los sonidos
del lugar, se pidió que se desvendaran los ojos.
Todos se reconocieron detenidos al borde mismo
del acantilado de esa quebrada.
El juego, entonces, fue el siguiente: “ahora hagan
lo que quieran”. El lugar era proporcionado, ceñido,
apretado. Allí todos jugamos y el juego mismo,
absolutamente libre, nos mostró que estábamos
todos cerca pero nunca ninguno pudo o supo estar
junto. Allí caímos en la cuenta que podíamos estar
cerca, reencontrándonos, tras la desorientación,
cerca los unos de los otros pero que no dependía de
la voluntad el estar junto. [5] La dispersión también
se contiene en lo cerca.
Séptimo Momento
A medida que las capaz
comienzan a perder
opacidad,estas tambien
desaparecen una a una de
manera paulatina, todo
esto al mismo tiempo que
la continuación del Primer
Acto de la “Apertura de
los Terrenos” comienza
a correr de arriba hacia
abajo.
35. palmeras propias de la zona, situada a menos de un
kilómetro a espaldas del centro de la ciudad de Viña
del Mar. Se llegó allí.
Todos los vendados fueron alineados. Tras un
silencio, que permitiera la expansión de los sonidos
del lugar, se pidió que se desvendaran los ojos.
Todos se reconocieron detenidos al borde mismo
del acantilado de esa quebrada.
El juego, entonces, fue el siguiente: “ahora hagan
lo que quieran”. El lugar era proporcionado, ceñido,
apretado. Allí todos jugamos y el juego mismo,
absolutamente libre, nos mostró que estábamos
todos cerca pero nunca ninguno pudo o supo estar
junto. Allí caímos en la cuenta que podíamos estar
cerca, reencontrándonos, tras la desorientación,
cerca los unos de los otros pero que no dependía de
la voluntad el estar junto. [5] La dispersión también
se contiene en lo cerca.
Séptimo Momento
A medida que las capaz
comienzan a perder
opacidad,estas tambien
desaparecen una a una de
manera paulatina, todo
esto al mismo tiempo que
la continuación del Primer
Acto de la “Apertura de
los Terrenos” comienza
a correr de arriba hacia
abajo.
36. palmeras propias de la zona, situada a menos de un
kilómetro a espaldas del centro de la ciudad de Viña
del Mar. Se llegó allí.
Todos los vendados fueron alineados. Tras un
silencio, que permitiera la expansión de los sonidos
del lugar, se pidió que se desvendaran los ojos.
Todos se reconocieron detenidos al borde mismo
del acantilado de esa quebrada.
El juego, entonces, fue el siguiente: “ahora hagan
lo que quieran”. El lugar era proporcionado, ceñido,
apretado. Allí todos jugamos y el juego mismo,
absolutamente libre, nos mostró que estábamos
todos cerca pero nunca ninguno pudo o supo estar
junto. Allí caímos en la cuenta que podíamos estar
cerca, reencontrándonos, tras la desorientación,
cerca los unos de los otros pero que no dependía de
la voluntad el estar junto. [5] La dispersión también
se contiene en lo cerca.
Séptimo Momento
A medida que las capaz
comienzan a perder
opacidad,estas tambien
desaparecen una a una de
manera paulatina, todo
esto al mismo tiempo que
la continuación del Primer
Acto de la “Apertura de
los Terrenos” comienza
a correr de arriba hacia
abajo.
37. del lugar, se pidió que se desvendaran los ojos.
Todos se reconocieron detenidos al borde mismo
del acantilado de esa quebrada.
El juego, entonces, fue el siguiente: “ahora hagan
cerca, reencontrándonos, tras la desorientación,
cerca los unos de los otros pero que no dependía de
la voluntad el estar junto. [5] La dispersión también
se contiene en lo cerca.
Séptimo Momento
A medida que las capaz
comienzan a perder
opacidad,estas tambien
desaparecen una a una de
manera paulatina, todo
esto al mismo tiempo que
la continuación del Primer
Acto de la “Apertura de
los Terrenos” comienza
a correr de arriba hacia
abajo.
38. del acantilado de esa quebrada.
El juego, entonces, fue el siguiente: “ahora hagan
la voluntad el estar junto. [5] La dispersión también
se contiene en lo cerca.
Séptimo Momento
A medida que las capaz
comienzan a perder
opacidad,estas tambien
desaparecen una a una de
manera paulatina, todo
esto al mismo tiempo que
la continuación del Primer
Acto de la “Apertura de
los Terrenos” comienza
a correr de arriba hacia
abajo.
39. Octavo Momento
Silencio entre un momento
de observación y otro.
Luego de este punto toda
la secuencia anteriormente
descrita se repite tres
veces más.