El documento clasifica los lenguajes de programación en 5 categorías según la forma de sus instrucciones: lenguajes imperativos que especifican el orden de ejecución de manera detallada, lenguajes declarativos que expresan qué debe lograrse sin prescribir cómo, lenguajes funcionales que constan de funciones predefinidas, lenguajes lógicos que expresan tareas usando lógica matemática formal, y lenguajes orientados a objetos que crean sistemas de clases y objetos.