Artículo publicado en la Revista Deusto (ISSN: 1886-2071) Nº 111 (verano 2011).

1. internet
Y éstos,
¿de qué viven?
Modelos de negocio en Internet
Imagen de Great Beyond (CC by-nc-sa)
a web es jovencita. Apenas veinte en los mentideros de Internet (y fuera) los libros, la música, etc. Ahora bien, una
L años la contemplan. Y sin embargo,
ya se ha llevado más de un susto. Allá
es: ¿cuál es el modelo de negocio de
estas plataformas web? La respuesta es
de las constantes en todos esos servicios
es el de la gratuidad. Bueno, quizás de-
por 1997 sufrió la cacareada burbuja de bien sencilla: la publicidad. Pero como biéramos matizar la palabra «gratis»
las «punto com», momento en el que quedaría un tanto pobre el artículo si lo y centrar su contexto en el plano mo-
muchas empresas vinculadas a Internet dejamos aquí, pondremos la lupa sobre netario, porque, como muy bien decía
subieron su valor bursátil como la es- las principales compañías que hoy en Quevedo «es de necios confundir valor y
puma para que, años después, alguien día «roban» los minutos de los inter- precio». Y si bien trabajan con un mode-
viera al rey desnudo, con el consiguiente nautas. lo freeconomics, los usuarios les paga-
descalabro. mos con otra moneda: nuestro tiempo.
Empecemos por el gigante de Internet, y Todo el que invertimos navegando por
Tras una larga etapa de desconfianza, la cada día de más y más mundos que no sus múltiples espacios se convierte en un
Red vuelve ahora a tomar altos vuelos y sólo son digitales (por ejemplo, el ener- intervalo en el que nos pueden «impac-
muchos son los que vaticinan un nuevo gético). Google diversifica su negocio en tar» con anuncios. Pero eso no es todo:
susto. Empresas como Facebook, Goo- muchos frentes con más de treinta servi- cuantas más plataformas diferentes de
gle o Twitter cotizan al alza. Así que, cios diferentes: desde el correo electró- su dominio visitemos, más visible y ras-
una de las preguntas que más se repite nico, pasando por los mapas, los vídeos, treable será nuestra baba de caracol que
50 v e r a n o

2. les ofrece un perfil completo de lo que Con Twitter, el modelo de negocio se canción (y ya, del coste tecnológico que
internet
somos y lo que nos gusta. Toda una de- vuelve algo más gris. Cada día crece el suponía tener todos esos servidores y dis-
licatessen para los expertos en marke- número de usuarios que tiene que so- ponibilidad, ni hablamos...). Ahora está
ting ávidos por vender. Precisamente su portar la plataforma, creciendo también mezclando ese modelo de publicidad con
médula espinar es ni más ni menos que de manera exponencial los recursos tec- el de servicios premium, cobrando una
Google Adwords, su propio sistema de nológicos que tienen que destinar para cuota mensual a sus usuarios. Por tanto,
publicidad online. Así que, por más que que la maldecida ballena de «web caí- tras ofrecer la «droga» gratis, ahora pasa
nos presenten su empresa (fijaos que he da» no aparezca. Y sin embargo, aún no a pedir una cantidad mínima a sus usua-
puesto empresa y no fundación u ONG) tienen muy claro cómo van a rentabilizar rios más «enganchados».
como un ente casi filantrópico, el hecho a toda esa gente. Los socios se comien-
de que nos ofrezcan tantos servicios gra- zan a impacientar mientras Twitter sólo Y frente a estas grandes compañías, mo-
tis tiene una explicación mucho más cer- asoma su patita con Trending Topics (los delos como el de la Wikipedia, que sopor-
cana al cobre. temas más calientes de los que se están tan su gestión de contenidos en la inteli-
hablando en la Red) patrocinados y una gencia colectiva y su subsistencia, en las
Facebook y twitter idea que aún no han puesto en práctica donaciones de los internautas.
Facebook tampoco le va a la zaga y además de twits patrocinados que aparezcan en
de la publicidad con la que rellenan cual- su buscador o incluso en el timeline de Quitando a esta plataforma, en el resto
quier hueco de su página web, «trafican» los usuarios. de ejemplos analizados, hay una materia
también con nuestros datos. No hay más prima recurrente: los usuarios, su tiempo y
que echar un vistazo a sus condiciones de Spotify hizo una apuesta doble con su ser- sus datos. Sin embargo, hay más modelos
uso (esa letra pequeña con una redacción vicio gratuito: por un lado, captar al máxi- en la web: comercio electrónico, software
farragosa que casi ningún usuario se lee mo número de usuarios en un tiempo muy como servicio, subastas, donaciones,…
cuando se crea su cuenta), donde avisan corto, convirtiéndose casi en un estándar Esperemos que el «Big Brother is watching
ya (y el que avisa no es traidor) que podrán de facto para la escucha de la música; por you» no sea la única alternativa para lo-
vender nuestra información a terceros. Así otro, trabajar el modelo de la publicidad. grar éxito en la Red.
que su estrategia pivota también sobre el Éste último le salió rana, dado que con los
hecho de mantenernos muchos minutos anuncios que interrumpían a esas cuentas Lorena Fernández
en su parcela, de modo que dejemos más gratuitas no les llegaba para pagar a las loretahur@gmail.com
y más información y veamos los anuncios discográficas y a las gestoras de derechos
que tienen preparados para nosotros. de autor, cada vez que se reproducía una
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