La artesanía peruana es extremadamente diversa y se encuentra entre las más variadas del mundo. Es fundamental para la identidad peruana y para la supervivencia de miles de familias. Contiene siglos de historia con formas y símbolos prehispánicos que se fusionan con elementos españoles. La excelencia de la artesanía peruana se manifiesta en diseños textiles, representaciones de la vida campesina, tallas de madera, orfebrería, y cerámica.
2. La artesanía peruana se encuentra entre las más variadas del mundo,
como lo prueba la amplia red de exportadores que cada año expone el
ingenio de los peruanos en mercados europeos, asiáticos y
norteamericanos. Su diversidad, colorido, creatividad y múltiple
funcionalidad hacen de ella una actividad fundamental no sólo para la
configuración de la identidad peruana sino también para la
supervivencia de miles de familias y aún de pueblos enteros, como los de
Sarhua y Quinua, en Ayacucho.
Pequeñas y grandes piezas que causan la admiración de propios y
extraños, contienen siglos de historia cargados de formas y también
símbolos prehispánicos que se funden y conviven con otros traídos por los
españoles. Esa identidad múltiple y compleja es, quizá y
paradójicamente, una de las razones de la marcada tendencia de la
artesanía peruana al moderno "arte ingenuo" que impregna de ternura e
inocente sabiduría a sus piezas.
La excelencia de los oficios artesanales en el Perú se manifiesta, por
ejemplo, en la armonía de los diseños geométricos en los tejidos, la
minuciosa representación de la vida campesina en los mates burilados, el
mestizaje cultural y el colorido de los retablos. Pero también en la
finísima talla de las piedras de Huamanga, el complejo barroquismo de
las tallas en madera, la belleza de las piezas en oro y plata y las múltiples
formas que toma el barro en la cerámica.
Estas obras son sólo algunas de las manifestaciones de un pueblo que se
comunica principalmente a través del arte, utilizando para ello un
lenguaje cuyas claves fundamentales son la abundancia, la fertilidad y la
apuesta por el futuro.
3. En el Perú, aproximadamente 3000 fiestas típicas
son celebradas cada año. La mayoría de estas son
organizadas para celebrar el día de un santo patrón.
Esos santos originalmente formaron parte del
calendario cristiano en el Período Colonial pero
siempre estuvieron mezclados con la religión mágica
de las regiones andinas. Un buen ejemplo de esta
"fusión cultural" es la Festividad del Corpus Christi
en Cusco. Este día religioso, originalmente
introducido por los españoles, fue aceptado por los
habitantes peruanos ya que tenía más similitudes
con un antiguo ritual inca que con una práctica del
Catolicismo.
Básicamente en los tradicionales pueblos alto-
andinos o en la selva, existen varias celebraciones
tradicionales que se relacionan con mitos antiguos
y/o importantes fechas agrícolas.
4. • En las regiones de los andes que otrora
pertenecieron al Imperio de los Incas, es muy
extendida la costumbre de utilizar a este
roedor, el cuy (Cavia tschudii), de la familia
de los conejillos de indias, para realizar
curaciones, rituales de limpieza de “Daños” y
el tratamiento de enfermedades. El
curandero toma el animal y lo pasa por el
cuerpo del paciente, muy atento a las
manifestaciones del animal, sin parar de
rezar (cabe señalar que algunas veces el cuy
muere durante este proceso).
• Luego el animal es sacrificado y sus entrañas
auscultadas por el oficiante para determinar
el tipo de enfermedad o “Daño” existente.
Muy a pesar de lo controversial que puede
parecer esta práctica ancestral para muchos,
es frecuente observar con estupor cómo se
logra un alto grado de exactitud en dichos
diagnósticos, principalmente con respecto a
enfermedades: en esos casos, al auscultar los
órganos del animal, se aprecian muchas
veces replicadas las dolencias del paciente.
Es común que se prefieran los cuyes de color
negro para eliminar “Daños”.
6. La costa, más influida por la cultura española, combina ritmos
tradicionales europeos como el vals y la polca con ritmos diversos, sobre
todo, de origen africano. No en vano, en la Lima colonial, la población de
esclavos negros era la mitad de la población total de la ciudad. La música
criolla actual surge a fines del siglo XIX como parte del proceso de
transformación social que sufre la ciudad de Lima, recorriendo diferentes
estados hasta la actualidad. El estilo limeño más conocido es el vals
peruano, popularizado por importantes compositores como: Carlos A.
Saco, Aarón Landa, Felipe Salaverry y Chabuca Granda quienes son
considerados los principales compositores de la música criolla, con
canciones como Rosa Elvira, el plebeyo, el huerto de mi amada, el
canillita - uno - La flor de la canela, Fina estampa y José Antonio' - otra -.
Otras canciones conocidas de este género son: Alma, A la Huaca china,
corazón y vida, Madre, Ódiame, Mi propiedad privada y El rosario de mi
madre. Además del vals o valse, la música criolla incluye los géneros de
la polca(estos géneros de origen polaco llegaron a Sudamérica en la
segunda mitad del siglo XIX junto con el Schotich, la mazurka y el paso
doble español) y la marinera, esta última, con origen en la
antigua zamacueca. La marinera es la danza nacional del Perú, nombrada
por el literato Abelardo Gamarra en honor de los marinos que lucharon en
contra del ejército de Chile en la Guerra del Pacífico. Entre los peruanos de