Este documento proporciona instrucciones para crear un volcán de arcilla o masa de sal que erupciona. Los pasos incluyen moldear el volcán, dejarlo secar, pintarlo y luego mezclar bicarbonato de sodio, colorante rojo y detergente dentro del volcán. Al agregar vinagre, se produce una reacción química que libera dióxido de carbono y hace que la mezcla espume y "erupcione" del volcán.
2. Masa de sal o arcilla
Tempera o acrílico marrón
Un vaso descartable
Vinagre de alcohol
Detergente
Bicarbonato de sodio
Colorante o acrílico rojo
3. Para realizar el volcán el primer paso es
tomar el vaso descartable y cubrirlo con la
masa de sal. De esta forma se le va a ir
dando forma de un verdadero volcán. Luego
se deja secar de 3 a 5 horas (esto depende la
masa que se utilice).
4. Una vez que se seque nos quedara algo así
como muestra la figura:
5. El siguiente paso es pintarlo para darle una
apariencia de un verdadero volcán.
6. Una vez pintado se deja secar como mínimo
una hora. Nos quedara el volcán como
muestra la figura.
7. ¡AHORA SI ! Una vez terminado lo que seria
el volcán se comienza a preparar la mezcla
que va dentro para generar una explosión
volcánica.
Primero se agrega el bicarbonato de sodio
mas o menos un vaso pequeño como el de la
figura.
8. En segundo lugar se agrega el colorante rojo
para dar la apariencia del color de la lava
volcánica. De este colorante se agrega mas o
menos medio vaso de los que veníamos
utilizando anteriormente.
9. En tercer lugar se agrega un poquito de
detergente. Lo que generará luego una
espuma.
10. Una vez agregados estos tres componentes
con una cucharita los mezclamos.
11. Por ultimo se agrega una cierta cantidad a
gusto de vinagre.
12.
13. Al añadir el vinagre (ácido acético) a la mezcla
que contenía bicarbonato sódico (base) se
produce una reacción química que libera una
gran cantidad de dióxido de carbono (gas CO2),
observándose en la espuma enrojecida.
Este experimento no es una copia real de lo que
se produce en el interior de un volcán ya que las
erupciones volcánicas se producen por un
aumento de la presión interna en los conductos
que surgen del magma terrestre y llegan hasta la
superficie. Cuando la presión es suficientemente
grande, estos conductos no pueden soportarlo y
se quiebran en su punto más frágil, causando una
erupción de roca fundida (lava) que sale a toda
velocidad de la rotura en la corteza terrestre.