Los ángeles no tienen una apariencia física conocida, pero a veces se manifiestan a los humanos como personas normales o seres rodeados de luz. Algunos ángeles descritos en la Biblia tienen alas y ropas blancas. Aunque hermosos, los ángeles fueron creados por Dios para servirle a él y a los humanos, y solo Dios merece adoración.