Bulimia: Forma parte de un trastorno psicológico y alimentario. Es una conducta durante la cual el individuo se aleja de las pautas de alimentación saludable, consumiendo comida en exceso en periodos de tiempo muy cortos, para después buscar eliminar el exceso de alimento a través de ayunos, vómitos, purgas o laxantes. Tipos de bulimia: En función del tipo de purga que utilizan para compensar el atracón, tenemos: Tipo purgativo: cuando se utiliza como conducta compensatoria el vómito , los laxantes , los diuréticos , enemas … para eliminar lo más pronto posible el alimento del organismo. Tipo no purgativo: Entre el 6% y el 8% de los casos de bulimia se llevan a cabo otras conductas compensatorias, como el ejercicio físico intenso, o hacer mucho ayuno; es un método menos efectivo. Este tipo de bulimia suele presentarse también en quienes presentan el tipo purgativo, pero es una forma secundaria de control del peso. Tratamientos: Se puede recurrir a un tratamiento ambulatorio o a la hospitalización. En primer lugar se trata de evitar los vómitos, normalizar el funcionamiento metabólico del enfermo, se impone una dieta equilibrada y nuevos hábitos alimenticios. Junto a este tratamiento, se desarrolla el tratamiento psicológico con el fin de reestructurar las ideas racionales y corregir la percepción errónea que el paciente tiene de su propio cuerpo. El tratamiento también implica la colaboración de la familia. La curación de la bulimia se alcanza en el 40 por ciento de los casos. La mortalidad en esta enfermedad supera a la de la anorexia debido a las complicaciones derivadas de los vómitos y el uso de purgativos. Síntomas de la bulimia: Atracones de comida. Pérdida del autodominio durante los atracones. El uso regular de vómito auto inducido para evitar el aumento de peso. Dos episodios de atracón de comida a la semana. Preocupación exagerada por la figura y el peso corporal Antecedentes de dietas frecuentes. Síntomas de depresión. Excesivo temor a engordar. Comer en secreto o lo más inadvertidas posible. Mantenimiento de al menos un estándar normal mínimo de peso. A diferencia de las anoréxicas, las bulímicas no tienen una figura demacrada que las traicione. Efectos directos y secundarios: Rotura esofágica o gástrica . Neumotórax (entrada de aire al interior de la cavidad torácica ). Niveles bajos de potasio en la sangre. Arritmia cardiaca. Ansiedad o compulsión por comer. Obsesión por mantener un peso corporal debajo del normal. Abuso en el consumo de medicamentos laxantes y diuréticos. Seguimiento de regímenes dietéticos diversos. Deshidratación. Alteraciones menstruales y esterilidad. Tanto los comienzos de la anorexia como de la bulimia son los mismos, y en muchos casos están condicionados por la sociedad actual y los cánones de belleza establecidos.