4. LAS JARCHAS
Vayse meu corachón de mib:
ya Rab, ¿si se me tornarád?
¡Tan mal meu doler li-l-habib!
Enfermo yed, ¿cuánd sanarád?
(hacia los siglos X-XI)
(Mi corazón se me va de mí.
Oh Dios, ¿acaso se me tornará?
¡Tan fuerte mi dolor por el amado!
Enfermo está, ¿cuándo sanará?)
5. EL POEMA DEL MÍO CID
“Con sus ojos muy grandemente llorando
tornaba la cabeza y estábalos mirando”
FINALES DEL S. XII -
INICIOS DEL S. XIII
6. GONZALO DE BERCEO
h. 1195 – h. 1265
“Era un simple clérigo pobre de clerecía
dicié cutiano missa de la Sancta María;
non sabié decir otra, diciéla cada día,
más la sabié por uso que por sabiduría. “
Milagros de Nuestra Señora
7. JUAN RUIZ, ARCIPRESTE DE HITA
h. 1283 – h. 1353
"Si quisieres amar dueñas o otra cualquier muger,
muchas cosas avrás primero a aprender;
para que ella te quiera en amor acoger,
sabe primeramente la muger escoger.”
Libro del Buen Amor
8. AUTO DE LOS REYES MAGOS
S. XII
“[CASPAR] [Solo.]
¡Dios criador, cuál maravila,
no sé cuál es aquesta strela
!Agora primas la he veída;
poco tiempo ha que es nacida.
¿Nacido es el Criador
que es de la[s] gentes Senior?
Non es verdad, no sé qué digo;
todo esto non vale un figo.”
9. ALFONSO X, EL SABIO
1221 - 1284
”Qué cosa es feudo, et onde tomó este nombre. Et quántas
maneras son de él.
Feudo es bienfecho que da el señor al algunt home porque
se torna su vasallo, et le face homenatge de serle leal: et
tomó este nombre de fe que debe siempre guardar el vasallo
al señor. Et son dos maneras de feudo: la una es cuando es
otorgado sobre villa, o castiello o otra cosa que sea raíz: et
este feudo a tal non puede ser tomado al vasallo, fueras
ende si fallesciere al señor las posturas que con él puso, e sil
feciese algunt yerro tal por que lo debiese perder, así como
se muestra adelante. Et la otra manera es la que dicen feudo
de cámara: et este se face quando el rey pone maravedís a
algunt su vasallo cada año de su cámara: et este feudo atal
puede el rey toller cada que quisiere.”
Las Partidas
10. DON JUAN MANUEL
1282 - 1347
“Otro día, hablando de sus asuntos el Conde Lucanor con
Patronio, le dijo:
-Patronio, algunos me aconsejan que reúna la mayor cantidad
posible de dinero, y aun me dicen que esto me conviene más
que ninguna otra cosa. Por eso os ruego que me deis vuestra
opinión sobre este asunto.
-Señor conde -dijo Patronio-, aunque a los grandes señores os
sea necesario tener dinero en muchas ocasiones y, sobre todo,
para que nunca incumpláis vuestros deberes por su falta, no por
eso podéis pensar en reunir sólo dinero, abandonando otras
obligaciones que tenéis con vuestros vasallos, así como las
propias de vuestro estado y dignidad, pues si actuarais de ese
modo podría sucederos lo que a un lombardo que vivió en
Bolonia.
El conde le preguntó qué le había sucedido.”
El Conde Lucanor
11. LOS ROMANCES
“¡Abenámar, Abenámar,
moro de la morería,
el día que tú naciste
grandes señales había!
Estaba la mar en calma,
la luna estaba crecida,
moro que en tal signo nace
no debe decir mentira.”
Romance de Abenámar
DESDE EL S. XIV HASTA NUESTROS DÍAS
12. JUAN DE MENA – 1411-1456
MARQUÉS DE SANTILLANA – 1398-
1458
“Al muy prepotente don Juan el segundo,
aquel con quien Júpiter tuvo tal zelo
que tanta de parte le fizo del mundo
quanta a sí mesmo se fizo del çielo,
al gran rey de España, al Çésar novelo;
al que con Fortuna es bien fortunado,
aquel en quien caben virtud e reinado;
a él, la rodilla fincada por suelo.”
“Serranilla de Moncayo,
Dios vos dé buen año entero,
ca de muy torpe lacayo
faríades cavallero.”
Serranillas
Laberinto de fortuna
13. JORGE MANRIQUE
Recuerde el alma dormida,
avive el seso e despierte
contemplando
cómo se passa la vida,
cómo se viene la muerte
tan callando;
cuán presto se va el plazer,
cómo, después de acordado,
da dolor;
cómo, a nuestro parescer,
cualquiere tiempo passado
fue mejor.
Coplas por la muerte de su padre
h. 1440 - 1479
14. FERNANDO DE ROJAS
h. 1465 - 1541
“CALISTO.- En esto veo, Melibea, la
grandeza de Dios.
MELIBEA.- ¿En qué, Calisto?
CALISTO.- En dar poder a natura que de tan
perfecta hermosura te dotase, y hacer a mi
inmérito tanta merced que verte alcanzase, y,
en tan conveniente lugar, que mi secreto
dolor manifestarte pudiese. Por cierto, los
gloriosos santos que se deleitan en la visión
divina, no gozan más que yo ahora
contemplándote.”
La Celestina
16. GARCILASO DE LA VEGA
1501 - 1536
“¡Oh dulces prendas, por mí mal
halladas,
dulces y alegres cuando Dios quería,
Juntas estáis en la memoria mía,
y con ella en mi muerte conjuradas! “
SONETO X -fragmento-
17. FERNANDO DE HERRERA
1534 - 1597
“Temiendo tu valor, tu ardiente espada,
sublime Carlo, el bárbaro africano,
y el bravo horror del ímpetu otomano
la altiva frente humilla quebrantada.”
SONETO Al Emperador -fragmento-
18. SANTA TERESA DE JESÚS
1515 - 1582
“Vivo Sin vivir en mí,
y tan alta Vida espero
que muero porque no
muero.”
19. 1527 - 1591FRAY LUIS DE LEÓN
“¿Y dejas, Pastor santo,
tu grey en este valle hondo, escuro,
con soledad y llanto;
y tú, rompiendo el puro
aire, ¿te vas al inmortal seguro?”
Oda XVIII: En la Ascensión
20. 1542 - 1591
SAN JUAN DE LA CRUZ
“¡Oh llama de amor viva,
que tiernamente hieres
de mi alma en el más profundo centro!
pues ya no eres esquiva,
acaba ya, si quieres;
rompe la tela de este dulce encuentro.”
Llama de Amor Viva
21. LAZARILLO DE TORMES h. 1540
“Pues sepa vuestra merced
ante todas cosas que a mí
llaman Lázaro de Tormes,
hijo de Tome González y de
Antonia Pérez, naturales de
Tejares, aldea de
Salamanca.”
22. MIGUEL DE CERVANTES 1547 - 1616
“En un lugar de la Mancha,
de cuyo nombre no quiero
acordarme, no ha mucho
tiempo que vivía un hidalgo
de los de lanza en astillero,
adarga antigua, rocín flaco y
galgo corredor.”
Don Quijote de la Mancha
24. MATEO ALEMÁN
" Hay diferencia entre buena voluntad, amistad y amor. Buena voluntad es la que puedo tener al que nunca vi ni tuve del otro
conocimiento que oír sus virtudes o nobleza, o lo que pudo y bastó moverme a ello. Amistad llamamos a lo que comúnmente
nos hacemos tratando y comunicando o por prendas que corren de por medio. De manera, que a la buena voluntad se dice entre
ausentes y amistad entre presentes. Pero amor corre por otro camino.”
Guzmán de Alfarache
1547 - 1613
25. LUIS DE GÓNGORA 1561 -1627
“Goza cuello, cabello, labio y frente,
Antes que lo que fue en tu edad dorada
Oro, lilio, clavel, cristal luciente,
No sólo en plata o vïola troncada
Se vuelva, más tú y ello juntamente
En tierra, en humo, en polvo, en sombra, en
nada.”
SONETO –fragmento-
26. LOPE DE VEGA
“COMENDADOR:
¿Y sabe también que soy
Fernán Gómez de Guzmán?”
FUENTEOVEJUNA
1562 - 1635
27. FRANCISCO DE QUEVEDO
“Alma, a quien todo un Dios prisión ha sido,
Venas, que humor a tanto fuego han dado,
Médulas, que han gloriosamente ardido,
Su cuerpo dejará, no su cuidado;
Serán ceniza, mas tendrá sentido;
Polvo serán, mas polvo enamorado.”
SONETO –fragmento-
1580 - 1645
28. TIRSO DE MOLINA
“PAULO
Señor, perdona
si injustamente me vengo.
Tú me has condenado ya;
tu palabra es caso cierto
que atrás no puede volver.
Pues si es así, tener quiero
en el mundo buena vida,
pues tan triste fin espero.”
El condenado por desconfiado
1579 - 1648
29. CALDERÓN DE LA BARCA
“SEGISMUNDO:
¿Qué es la vida? Un frenesí.
¿Qué es la vida? Una ilusión;
una sombra, una ficción
y el mayor bien es pequeño.
¡Que toda la vida es sueño
y los sueños, sueños son!”
La vida es sueño
1600 - 1681
30. BALTASAR GRACIÁN
“¿Qué te ha parecido de España? -dijo Andrenio.
Murmuremos un rato della aquí donde no nos oyen. “
EL CRITICÓN
1601 - 1658
31. SOR JUANA INÉS DE LA
CRUZ
“Al que ingrato me deja, busco amante; 1651 - 1695
al que amante me sigue, dejo ingrata;
constante adoro a quien mi amor maltrata;
maltrato a quien mi amor busca constante.
Al que trato de amor, hallo diamante,
y soy diamante al que de amor me trata;
triunfante quiero ver al que me mata,
y mato al que me quiere ver triunfante. “
SONETO –fragmento-
33. GASPAR MELCHOR DE
JOVELLANOS
1744 - 1811
“Entre otras, se ha propuesto a vuestra
alteza la de limitar y arreglar por tasación
la renta de las tierras en favor de los
colonos, pero esta ley, reclamada con
alguna apariencia de equidad, como
otras de su especie, sería igualmente
injusta. Se pretende que la subida de las
tierras no tiene otro origen que la codicia
de los propietarios; pero, ¿no la tendrán
también en la de los colonos?”
Informe sobe la Ley Agraria
34. BENITO JERÓNIMO
FEIJOO
1676 - 1764
”Yendo de camino un hombre y un león, se les ofrece disputar
quiénes eran más valientes, si los hombres, si los leones…”
El hombre y el león
35. JOSÉ CADALSO
1741 - 1782
" He logrado quedarme en España después
del regreso de nuestro embajador, como lo
deseaba muchos días ha, y te lo escribí varias
veces durante su mansión en Madrid. Mi
ánimo era viajar con utilidad …”
Cartas Marruecas
36. JUAN MELÉNDEZ VALDÉS
1754 - 1817
“Al partir y dejarla,
medrosa de mi olvido,
me dio para memoria
Dorila un Cupidillo,
diciéndome: -En mi seno
ya queda, zagal mío,
si tú la imagen llevas,
por señor el dios mismo. “
De un cupido
37. RAMÓN DE LA CRUZ
1731 - 1794
TODOS
«Al pasar por un convento,
hallé la puerta cerrada.
Que tira que tira, que sala que sala.
Yo tiré de un cordelito
y respondió una campana.
Que tira que tira, que sala que sala,
que aferra velacho, que caza la gavia».
Los bandos de Lavapiés
38. LEANDRO FERNÁNDEZ DE
MORATÍN
1760 - 1828
“DON CARLOS.- Eso no... Delante de mí
nadie ha de ofenderla.
DOÑA FRANCISCA.- ¡Carlos!
DON CARLOS.- (A DON DIEGO.)
Disimule usted mi atrevimiento... He visto
que la insultaban y no me he sabido
contener.
DOÑA IRENE.- ¿Qué es lo que me
sucede, Dios mío? ¿Quién es usted?... ¿Qué
acciones son éstas?... ¡Qué escándalo! “
El sí de las niñas
41. J0SÉ DE ESPRONCEDA (1808-1842)
CANCIÓN DEL PIRATA
Con diez cañones por banda,
viento en popa a toda vela,
no corta el mar, sino vuela
un velero bergantín;
bajel pirata que llaman,
por su bravura, el Temido,
en todo mar conocido
del uno al otro confín.(…)
42. MARIANO JOSÉ DE
LARRA (1809-1837)
"Vuelva usted mañana (artículo del
Bachiller)"
Gran persona debió de ser el primero que
llamó pecado mortal a la pereza.
Nosotros, que ya en uno de nuestros
artículos anteriores estuvimos más serios
de lo que nunca nos habíamos
propuesto, no entraremos ahora en largas
y profundas investigaciones acerca de la
historia de este pecado, por más que
conozcamos que hay pecados que pican
en historia, y que la historia de los
pecados sería un tanto cuanto divertida.
Convengamos solamente en que esta
institución ha cerrado y cerrará las
puertas del cielo a más de un cristiano.
(…)
43. JOSÉ ZORRILLA
(1817-1893)
DON JUAN TENORIO
” (…) Cálmate, pues, vida mía;
reposa aquí, y un momento
olvida de tu convento
la triste cárcel sombría.
¡Ah! ¿No es cierto, ángel de amor,
que en esta apartada orilla
más pura la luna brilla
y se respira mejor?
Esta aura que vaga llena
de los sencillos olores
de las campesinas flores
que brota esa orilla amena (…)”
44. GUSTAVO ADOLFO BÉCQUER
(1836-1870)
RIMA XXXIX
¿A qué me lo decís? Lo sé: es mudable,
es altanera y vana y caprichosa;
antes que el sentimiento de su alma,
brotará el agua de la estéril roca.
Sé que en su corazón, nido de sierpes,
no hay una fibra que al amor responda;
que es una estatua inanimada..., pero...
¡es tan hermosa!
45. ROSALÍA DE CASTRO ((1837-1885)
“Negra sombra”, de FOLLAS NOVAS
Cando penso que te fuches,
negra sombra que me asombras,
ó pé dos meus cabezales
tornas facéndome mofa.
Cando maxino que es ida,
no mesmo sol te me amostras,
i eres a estrela que brila,
i eres o vento que zoa.
Si cantan, es ti que cantas,
si choran, es ti que choras,
i es o marmurio do río
i es a noite i es a aurora.
En todo estás e ti es todo,
pra min i en min mesma moras,
nin me abandonarás nunca,
sombra que sempre me asombras.
47. JOSE MARÍA DE PEREDA
(1833-1906)
El sabor de la tierruca
" A todo esto, los plúmbeos nubarrones se Iban desmoronando en el
cielo, y extendían su zona tormentosa, cárdena y fulgurante, hasta la
misma senda que recorría el sol en su descenso; y cuando un rayo de
sol lograba rasgar los apretados celajes y caía sobre los entrelazados
grupos de los combatientes, relucía el sudor en los tostados rostros
manchados de sangre y medio ocultos bajo las greñas desgajadas de
la cabeza(...)”
48. PEDRO ANTONIO DE ALARCÓN
(1833-1891)
La Alpujarra (…)
Primera parte
El valle de Lecrin
- I -
Preparativos de viaje
Todo estaba dispuesto para marchar.
Era la mañana del 19 de Marzo de 1872, día de San José -en el
Almanaque romano- y víspera de la entrada de la primavera en el
hemisferio septentrional.
Hacía tres días que mi compadre y yo nos hallábamos en Granada.
Mi compadre era aquel excelente amigo de Madrid que iba a la
Alpujarra (…)
49. JUAN VALERA (1824-1905)
PEPITA JIMÉNEZ
Cartas de mi sobrino
22 de Marzo.
Querido tío y venerado maestro: Hace cuatro días
que llegué con toda felicidad a este lugar de mi
nacimiento, donde he hallado bien de salud a mi
padre, al señor vicario y a los amigos y parientes.
El contento de verlos y de hablar con ellos,
después de tantos años de ausencia, me ha
embargado el ánimo y me ha robado el tiempo, de
suerte que hasta ahora no he podido escribir a Vd.
(…)
50. BENITO PÉREZ GALDÓS
(1843-1920)
TRAFALGAR
Se me permitirá que antes de referir
el gran suceso de que fui testigo,
diga algunas palabras sobre mi
infancia, explicando por qué
extraña manera me llevaron los
azares de la vida a presenciar la
terrible catástrofe de nuestra
marina. (…)
51. LEOPOLDO ALAS “CLARÍN”
(1852-1901)
LA REGENTA
(…) Celedonio sintió un deseo miserable, una perversión de la
perversión de su lascivia: y por gozar un placer extraño, o por probar si
lo gozaba, inclinó el rostro asqueroso sobre el de la Regenta y le besó
los labios.
Ana volvió a la vida rasgando las nieblas de un delirio que le causaba
náuseas.
Había creído sentir sobre la boca el vientre viscoso y frío de un sapo.
52. EMILIA PARDO BAZÁN (1852-1921)
LOS PAZOS DE ULLOA
Por más que el jinete trataba de sofrenarlo agarrándose con todas
sus fuerzas a la única rienda de cordel y susurrando palabritas
calmantes y mansas, el peludo rocín seguía empeñándose en bajar
la cuesta a un trote cochinero que descuadernaba los intestinos,
cuando no a trancos desigualísimos de loco galope.(…)
53. II
EL SIGLO XX: Primera mitad
MODERNISMO
Y
GENERACIÓN DEL 98
54. RUBÉN DARÍO (1867-1916)
SONATINA
La princesa está triste... ¿Qué tendrá la
princesa?
Los suspiros se escapan de su boca de fresa,
que ha perdido la risa, que ha perdido el color.
La princesa está pálida en su silla de oro,
está mudo el teclado de su clave sonoro,
y en un vaso, olvidada, se desmaya una flor. (…)
55. MIGUEL DE UNAMUNO
(1864-1936)
A MI BUITRE
Este buitre voraz de ceño torvo
que me devora las entrañas fiero
y es mi único constante compañero
labra mis penas con su pico corvo.
El día en que le toque el postrer sorbo
apurar de mi negra sangre, quiero
que me dejéis con él solo y señero
un momento, sin nadie como estorbo.
Pues quiero, triunfo haciendo mi agonía
mientras él mi último despojo traga,
sorprender en sus ojos la sombría
mirada al ver la suerte que le amaga
sin esta presa en que satisfacía
el hambre atroz que nunca se le apaga.
56. ANTONIO MACHADO
(1875-1939)
CANCIONES
Abril florecía
frente a mi ventana.
Entre los jazmines
y las rosas blancas
de un balcón florido,
vi las dos hermanas.
La menor cosía,
la mayor hilaba ...
Entre los jazmines
y las rosas blancas,
la más pequeñita,
risueña y rosada
—su aguja en el aire—,
miró a mi ventana.
57. PÍO BAROJA (1872-1956)
OLABERRI EL MACABRO
Olaberri era un pesimista jovial. No encontraba en el mundo más que
vanidad y aflicción de espíritu. No tenía fe más que en la cal hidráulica y en
el cemento armado. Para él, detrás de toda satisfacción venía algo negro y
doloroso, que eran principalmente las facturas. -¿Ve usted esa chica que se
ha casado con el carabinero? -me preguntó hace tiempo con aire de
profunda conmiseración.
-Sí.
-¡Qué infelices! Ahora mucha alegría, ¿eh?, y de viaje, pero luego ya vendrán
las facturas.
A Olaberri le preocupaban las facturas. (…)
58. RAMÓN Mª DEL VALLE-INCLÁN
(1866-1936)
SONATA DE ESTÍO
Y desaparece velozmente, como esos etíopes carceleros de princesas en
los castillos encantados. Yo, espoleado por la curiosidad, salgo tras él.
Heme en el puente que ilumina la plácida claridad del plenilunio. Un negro
colosal, con el traje de tela chorreando agua, se sacude como un gorila,
en medio del corro que a su rededor han formado los pasajeros, y sonríe
mostrando sus blancos dientes de animal familiar. (…)
59. JUAN RAMÓN JIMÉNEZ
(1881-1958)
AGUA EN EL AGUA
Quisiera que mi vida
se cayera en la muerte,
como este chorro alto de agua bella
en el agua tendida matinal;
ondulado, brillante, sensual, alegre,
con todo el mundo diluido en él,
en gracia nítida y feliz.
60. FEDERICO GARCÍA LORCA
(1898-1936)
EL POETA PIDE A SU AMOR QUE LE ESCRIBA
Amor de mis entrañas, viva muerte,
en vano espero tu palabra escrita
y pienso, con la flor que se marchita,
que si vivo sin mí quiero perderte.
El aire es inmortal. La piedra inerte
ni conoce la sombra ni la evita.
Corazón interior no necesita
la miel helada que la luna vierte.
Pero yo te sufrí. Rasgué mis venas,
tigre y paloma, sobre tu cintura
en duelo de mordiscos y azucenas.
Llena pues de palabras mi locura
o déjame vivir en mi serena
noche del alma para siempre oscura.
61. RAFAEL ALBERTI
(1902-1999)
LA PALOMA
Se equivocó la paloma,
se equivocaba.
Por ir al norte fue al sur,
creyó que el trigo era el agua.
Creyó que el mar era el cielo
que la noche la mañana.
Que las estrellas rocío,
que la calor la nevada.
Que tu falda era tu blusa,
que tu corazón su casa.
(Ella se durmió en la orilla,
tú en la cumbre de una rama.)
62. LUIS CERNUDA
(1902-1963)
CONTIGO
¿Mi tierra?
Mi tierra eres tú.
¿Mi gente?
Mi gente eres tú.
El destierro y la muerte
para mi están adonde
no estés tú.
¿Y mi vida?
Dime, mi vida,
¿qué es, si no eres tú?
63. VICENTE ALEIXANDRE (1898-
1984)
ADOLESCENCIA
Vinieras y te fueras dulcemente,
de otro camino
a otro camino. Verte,
y ya otra vez no verte.
Pasar por un puente a otro puente.
—El pie breve,
la luz vencida alegre—.
Muchacho que sería yo mirando
aguas abajo la corriente,
y en el espejo tu pasaje
fluir, desvanecerse.
64. (1910-1942) MIGUEL HERNÁNDEZ
Llegó con tres heridas:
la del amor,
la de la muerte,
la de la vida.
Con tres heridas viene:
la de la vida,
la del amor,
la de la muerte.
Con tres heridas yo:
la de la vida,
la de la muerte,
la del amor.
65. EL SIGLO XX: segunda
mitad
DE LA
DICTADURA A
LA
DEMOCRACIA
66. CAMILO JOSÉ CELA (1916-
2002)
LA FAMILIA DE PASCUAL DUARTE
Tenía una perrilla perdiguera –la Chispa-, medio ruin, medio
bravía, pero que se entendía muy bien conmigo; con ella me iba
muchas mañanas hasta la Charca, a legua y media del pueblo
hacia la la raya de Portugal, y nunca nos volvíamos de vacío para
casa. Al volver, la perra se me adelantaba y me esperaba siempre
junto al cruce; había allí una piedra redonda y achatada como una
silla baja, de la que guardo tan grato recuerdo como de cualquier
persona; mejor, seguramente, que el que guardo de muchas de
ellas...
67. BLAS DE OTERO
A LA INMENSA MAYORÍA
Aquí tenéis, en canto y alma, al hombre
aquel que amó, vivió, murió por dentro
y un buen día bajó a la calle: entonces
comprendió: y rompió todos su versos.
(…)
(1916-1979)
68. (1905-1977) MIGUEL MIHURA
TRES SOMBREROS DE COPA
PAULA. - Hacer juegos malabares con tres sombreros de copa es muy
difícil... Se
caen siempre al suelo ...
DIONISIO.- Yo aprenderé a bailar como bailas tú y como baila Buby
PAULA.- Bailar es más difícil todavía. Duelen mucho las piernas y apenas
gana
uno dinero para vivir
DIONISIO.- Yo tendré paciencia y lograré tener cabeza de vaca y cola de
cocodrilo..
PAULA.- Eso cuesta aún más trabajo...
69. ANTONIO BUERO VALLEJO
(1916-2000)
HISTORIA DE UNA ESCALERA
FERNANDO.- No. Te lo suplico. No te marches. Es
preciso que me oigas... y que me creas. Ven.
(La lleva al primer peldaño.)
Como entonces.
(Con un ligero forcejeo la obliga a sentarse contra la
pared y se sienta a su lado. Le quita la lechera y la
deja junto a él. Le coge una mano.)
CARMINA.-¡Si nos ven!
FERNANDO.- ¡Qué nos importa! Carmina, por favor,
créeme. No puedo vivir sin ti. Estoy desesperado.
Me ahoga la ordinariez que nos rodea. Necesito
que me quieras y que me consueles. Si no me
ayudas no podré salir adelante.
70. MIGUEL DELIBES (1920-2012)
CINCO HORAS CON MARIO
En teniendo con qué alimentarnos y con qué cubrirnos, estemos con
eso contentos. Los que quieren enriquecerse caen en tentaciones, en
lazos y en muchas codicias locas y perniciosas que hunden a los
hombres en la perdición y en la ruina, porque la raíz de todos los males
es la avaricia, y por eso mismo me será muy difícil perdonarte, cariño,
por mil años que viva, el que me quitases el capricho de un coche.
71. RAFAEL SÁNCHEZ FERLOSIO
(1927)
EL JARAMA
“-Debían de establecer unos domingos el doble largos que los
días de la semana –había dicho Samuel- , ¿no es verdad,
Mariyayo?, ¿a que sí? Mientras no hagan eso no hay tu tía. -O
el triple. Todo lo largos que se hacen los días de labor. Con
eso ya estábamos al cabo de la calle.
-Sois la caraba, lo queréis todo
-No es todo, es algo.
(…)”
72. JOSÉ HIERRO (1922-2002)
CON LAS PIEDRAS, CON EL VIENTO
hablo de mi reino.
Mi reino vivirá mientras
estén verdes mis recuerdos.
Cómo se pueden venir
nuestras murallas al suelo.
Cómo se puede no hablar
de todo aquello.
El viento no escucha. No
escuchan las piedras, pero
hay que hablar, comunicar,
con las piedras, con el viento.
(…)
73. ÁNGEL GONZÁLEZ
(1925-2008)
CUMPLEAÑOS
Yo lo noto: cómo me voy volviendo
menos cierto, confuso,
disolviéndome en aire
cotidiano, burdo
jirón de mí, deshilachado
y roto por los puños.
Yo comprendo: he vivido
un año más, y eso es muy duro.
¡Mover el corazón todos los días
casi cien veces por minuto!
Para vivir un año es necesario
morirse muchas veces mucho.
74. JAIME GIL DE BIEDMA (1929-
1990)
NO VOLVERÉ A SER JOVEN
Que la vida iba en serio
uno lo empieza a comprender más tarde
-como todos los jóvenes, yo vine
a llevarme la vida por delante.
Dejar huella quería
y marcharme entre aplausos
-envejecer, morir, eran tan sólo
las dimensiones del teatro.
Pero ha pasado el tiempo
y la verdad desagradable asoma:
envejecer, morir,
es el único argumento de la obra.
75. LUIS GARCÍA MONTERO
(1958…)
DÉJAME, PENSAMIENTO, DÉJAME...
Déjame, pensamiento, déjame,
mañana seré tuyo,
volveré a ser tu presa.
Pero hoy,
mientras la luz araña en los árboles y pide
una oportunidad,
quiero que me recoja la inútil primavera.
A la casa del frío
regresaré mañana, cuando el tiempo
exponga sus razones
y el corazón pregunte
lo que falta por ver,
cuántos latidos
pueden quedarle para detenerse.