1. JUEGOS OLÍMPICOS LONDRES 2012
El 27 de Julio del 2012 se realizó, en el estadio olímpico de Stratford de Londres con capacidad para
62000 espectadores, la ceremonia de inauguración de los juegos olímpicos en su trigésima edición,
llamada LAS ISLAS DE LAS MARAVILLAS, con la participación de alrededor de 15000 voluntarios y con
una duración aproximada de tres horas y cuarenta y cinco minutos, bajo la dirección artística y
supervisión de Danny Boyle, director de algunas películas importantes.
En la primera parte de la ceremonia las islas de las maravillas, tal como lo llamo William Shasperk al
Reino Unido en su poesía la tempestad, y tras la exposición de un video que muestra el nacimiento del
rio Thames (Támesis), y que al recorrerlo da luz los campos y lugares de los suburbios londinenses y
mientras poco a poco ingresa a la ciudad anfitriona se muestran lugares históricos y turísticos
alternando con logros y reseñas olímpicas, se da inicio al con el toque de la campana de 23 toneladas
por parte del británico Bradley Wiggins ganador del tour de Francia.
Niños con capacidades especiales siguen la ceremonia entonando cánticos emblemáticos de Irlanda del
Norte, Gales, Escocia e Inglaterra mientras en la pista decorada al estilo de prados y campiñas inglesas
se recrea los inicios de la colonización, con las actividades rurales como agrícolas, de diversión, etc.
Tras recitar el actor Kenneth Branagh unos versos de la obra tempestad de William Shakespeare, sobre
un monte que en su cima se encuentra un árbol que simboliza al del edén, inicia la parte llamada
Pandemónium, al ritmo de 965 tambores -algunos solo cubetas metálicas- y con el liderazgo de Evelin,
una percusionista sorda que toca descalza, se inicia la transformación de los prados, granjas y campiñas
a la recreación de la revolución industrial con la presencia de 400 mineros, 4 chimeneas de 30 mts.de
altura que emanan humo, y con el característico esfuerzo de los trabajadores, la supervisión de los
inversionistas, realizan también su presencia movimiento activistas a favor de los derechos femeninos y
laborales.
El entorno toma un descanso para rendir un homenaje a los soldados caídos en la primera y segunda
guerra mundial, luego se comienza a fundir en acero un aro gigante que comienza a ascender y con la
aparición de cada punto cardinal de otros cuatro aros se juntan en lo alto y con el destellar de luces
pirotécnicas forman el símbolo instintivo de las Olimpiadas.
Un show sensorial cuyo mensaje principal del director es focalizar la historia y lugares propios y lo da a
conocer al mundo, una articulación mágica que impacta desde el desmontaje en vivo de los prados de
manera secuencial y coreógrafa.