1. ¿Somos dependientes?
En mi opinión, nosotros los peruanos somos una sociedad autónoma de individuos
dependientes. Somos una sociedad autónoma debido a que la sociedad en general no
depende de alguien más. Quiero decir, que por ejemplo si siguiéramos siendo colonia
de España, entonces no seríamos autónomos ya que no trabajaríamos por nuestra
propia cuenta, ni tomaríamos las decisiones generales que nosotros quisiéramos; sino
que dependeríamos de las decisiones que tome España por nosotros. Por otro lado,
todos los individuos que conforman esta sociedad autónoma son dependientes. Es
decir, a mi parecer, la mayoría de los peruanos somos dependientes de otra persona
porque siempre estamos tratando de hacer lo que hacen los demás o tratamos de
hacer elecciones según lo que nos diga alguien más y no tenemos mucha autonomía
para tomar nuestras propias decisiones. Los peruanos tendemos a ejercer nuestras
decisiones según las presiones del medio y esto pasa debido a que siempre estamos
preocupados del “qué dirán” las otras personas a mi alrededor independientemente de
si conozco a esa persona o no. Estamos tan preocupados de que pensarán las demás
personas si hacemos algo o si no lo hacemos que eso nos limita a tener autonomía e
incluso, algunas veces, nos hace perder grandes oportunidades en la vida. Por
ejemplo, imaginemos que los peruanos están yendo a votar y de pronto se encuentran
que hay dos candidatos: un candidato a quien se le consideraba autoritario y una
candidata a la que se le acusaba de que si la elegían liberaría a su padre que se
encontraba en prisión. De pronto, estos peruanos, dependientes del qué dirán, a la
hora de que se les preguntase ¿por quién votarás? Te darían una respuesta muy vaga
y con vaga me refiero a que te dirían no sé, aún estoy viéndolo; cuando ya tienen una
respuesta en mente con uno u otro candidato. No obstante, si se les hiciera la misma
pregunta a un grupo de peruanos, sería muy probable que estas personas elijan el
candidato por el que más votaría la mayoría. Incluso si hay personas que no votarían
por ese candidato, en ese momento dirían que votarán por ese candidato, puesto que
es el preferido de todos y como somos dependientes de lo que el o los demás hacen
también tengo que votar por ese candidato. Con este ejemplo dado, se puede
observar como los peruanos no podemos ejercer nuestra autonomía debido a la
presión del medio. Los peruanos siempre estamos tratando de hacer lo que es
considerado “correcto” por todos, si hacemos algo que no es considerado de esta
manera, pues simplemente estamos equivocados y nos empezarán a criticar. Luego,
ese miedo de que nos critiquen hace que no seamos autónomos, si no que dejemos
que cada decisión que tengamos que tomar la tome alguien más, para así decir “yo no
me equivoqué” o “yo hice eso porque tal persona me dijo”. Pero, si tan dependientes
somos del otro nos podríamos preguntar ¿nos preocupamos por el otro?, ¿nos
interesa si está bien o está mal? En Lima nos quejamos mucho sobre la inseguridad
ciudadana y ponemos muchas rejas en nuestras calles y contratamos guachimanes,
pero ¿Cómo hacen las personas que no tienen el dinero para pagar por estos
servicios? ¿Nos importa acaso lo que les suceda? Preguntas que se podrían
responder muy fácilmente. La mayoría de peruanos está preocupada por el “qué dirán
los demás”, y no importa quién lo diga porque de todas maneras es su imagen la que
tienen que proteger. Por el contrario, no les interesa si esa persona está bien o está
mal. En ese aspecto, cada peruano se preocupa por su propio bienestar o algunas
1
2. veces en el de su familia como máximo, los peruanos no piensan en un bienestar
colectivo de todos en general. Tratamos de alejarnos de los problemas que los demás
tienen, debido a que “no me sucedió a mí, entonces no tengo porque involucrarme o
tener problemas a razón de eso. En Lima, casi todos los días hay un asalto. Muchos
de estos asaltos son realizados a la vista de todas las demás personas, pero cuando
suceden nadie trata de impedir este asalto debido a que “no es una persona conocida
por mí a la que le está sucediendo eso” o “mejor no me meto en problemas y qué mala
suerte la de esa persona”. Por el contrario, si alguien ayuda a una persona que está
siendo robada y debido a esa ayuda que brindó sale herida, todos empezarán a
murmullar “que tonta fue esa persona por haber ayudado”, “no debió meterse en
problemas a las finales ni conocía a la persona que estaban robándole”. Es debido a
ese tipo de comentarios que las personas peruanas no son autónomas y no realizan lo
que en verdad quieren como el ayudar a alguien más que está siendo atacado. De
igual manera, en el ámbito de los estudios una situación parecida sucede. En el Perú,
la mayoría de los peruanos están convencidos que si estudias en el Perú no te irá tan
bien en la vida, pero si estudias en una universidad del extranjero serás “alguien en la
vida”. En ese caso, ¿qué significa para la mayoría de los peruanos “ser alguien en la
vida”? Al parecer, para la mayoría de los peruanos ser alguien en la vida significa que
al trabajar generes cantidades de dinero enormes; dejando de lado, la pasión con la
que realizas ese trabajo. Hoy en día, bastantes jóvenes piensan que las únicas
carreras que nos permitirán ser alguien en la vida y ganar un montón de dinero son las
carreras más conocidas y las más antiguas. Mucho de los jóvenes peruanos
actualmente desisten de estudiar o realizar lo que más les gusta debido a que lo que
quisieran estudiar o hacer no es muy conocido en el mercado y por lo tanto no les
generará tanto dinero como podría generarles el trabajar con una carrera que si es
más conocida por todos. En tal caso, muchos de los jóvenes al estar preocupados de
lo que dirán los demás acerca de sus elecciones al momento de escoger una carrera,
terminan tomando una decisión equivocada de la cual la mayoría se arrepiente
después y terminan molestos con la sociedad debido a que fue esa sociedad la que
los llevó a tomar una decisión incorrecta. Por otra parte, la mayoría de peruanos que
estudian creen que si se van del país a estudiar a un lugar en el extranjero todos
comentarán que por fin son alguien en la vida. A mi parecer, cada persona tiene una
oportunidad de ser alguien en la vida si es autónoma, si es que puede tomar sus
propias decisiones sin pensar en el qué dirán de las demás personas, ya que todos
siempre tenemos un pensamiento o algún sentimiento acerca de algo, el único
problema es que al estar entre personas que siempre están fijándose y hablando de lo
que le ocurre al otro pues terminamos tomando muchas decisiones erróneas y
equivocadas, las cuales nos terminamos arrepintiendo después en algún momento de
nuestra vida. En el momento en el que nos arrepentimos de haber hecho o tomado tal
decisión y la expresamos a los demás con nuestros verdaderos sentimientos y
opiniones, es cuando entramos a la etapa de madurez y por fin somos autónomos
haciendo lo que en verdad queremos. Finalmente, podremos recién decir que somos
felices al momento en el cual somos autónomos y maduros. Podremos ser felices con
nuestras vidas, ya que nuestra vida estará regida por nosotros y no por la presión de
todas las demás personas que siempre están buscando criticar al otro. Podremos
finalmente enfocarnos en nosotros mismos, cumplir nuestras metas y sueños puesto
que es lo que verdaderamente queremos y no lo que quieren otras personas.
2
3. Este obra está bajo una Licencia Creative Commons
Atribución-NoComercial-Compartir Igual 2.5 Perú.
Diego André Aguirre Ortiz
2012 - 02
3