La difracción de las señales de radio permite que las señales se propaguen más allá del horizonte y superen obstáculos sin necesidad de una línea de vista directa entre el transmisor y receptor. La cantidad de curvatura de la señal depende del grosor del objeto y la longitud de onda, y la difracción puede explicarse por el principio de Huygens y las zonas de Fresnel. Aunque la intensidad de la señal disminuye en la región obstruida, el campo de difracción sigue existiendo y puede producir una señ
1. La difracción de las señales de radio es la curva que hacen las señales alrededor de un objeto, y la cual provoca un cambio de dirección de la señal. La cantidad de curvatura o el cambio de dirección se incrementa cuando: el grosor de los objetos se reduce o aumenta la longitud de onda. A altas frecuencias tanto la difracción como la reflexión dependen de la geometría del objeto, al igual que: la amplitud, la fase y la polarización de la señal en el punto de difracción. A pesar de que la difracción puede provocar pérdidas a una señal (pérdidas por difracción), la difracción permite que las señales de RF:<br /> <br />a) Se propaguen sobre la superficie curva de la tierra, más allá del horizonte.<br />b) Superen obstáculos permitiendo así la comunicación aún cuando no haya LOS (Línea de Vista) entre el transmisor y el receptor y/o la señal transmitida no alcance al receptor por reflexión.<br /> <br />La difracción se puede explicar por el principio de Huygen (todos los puntos que forman el frente de onda de una señal se pueden considerar fuentes puntuales que producen onditas secundarias) y por las zonas de Fresnel. Se podría decir que la difracción es la propagación de onditas secundarias en la región obstruida por el obstáculo. Aunque la intensidad de la señal recibida decrece rápidamente conforme el receptor entra más en la región obstruida, el campo de difracción sigue existiendo y frecuentemente tiene la suficiente intensidad como para producir una señal útil en el receptor.<br /> <br /> <br />Las señales reflejadas en superficies distintas a la de la tierra son señales que golpean contra obstáculos, naturales o artificiales, como lomas, árboles, maleza, lagos, superficie del mar, postes, construcciones (casas, edificios, iglesias), automóviles, barcos, señalizaciones, etc. Estas señales, después de golpear contra estos obstáculos pueden ser reflejadas, dispersadas y/o difractadas hacia su destino y se podría causar interferencia constructiva o destructiva, también se podría provocar atenuación y por supuesto pérdidas o, en el mejor de los casos, ocasionar rutas indirectas por las cuales se lleva a cabo la comunicación cuando no existe línea de vista. Este esquema se da sobre todo en las comunicaciones móviles inalámbricas.<br /> <br />